Publicado 21/10/2019 13:49

Camerún.- Decapitado un policía por supuestos milicianos separatistas en una de las regiones anglófonas de Camerún

MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades de Camerún han confirmado la decapitación de un policía en la localidad de Bamenda, capital de la Región Noroeste, uno de los epicentros de las protestas de los separatistas anglófonos del país.

Fuentes de seguridad citadas por el diario local 'Journal du Cameroun' han detallado que personas no identificadas que iban a bordo de una motocicleta lanzaron un saco en una zona de la ciudad.

La inspección del saco reveló que en su interior había una cabeza humana a la que le habían arrancado los ojos y un carné de identidad correspondiente al policía, identificado como Nwana Paul Vawahat y secuestrado horas antes.

Por el momento no ha habido reclamación de la autoría, si bien las autoridades achacan este tipo de incidentes a los separatistas armados que operan en la región, que exigen la creación del Estado de Ambazonia.

El presidente del país, Paul Biya, se comprometió a principios de octubre a considerar "con atención" las recomendaciones formuladas al término de los cuatro días de diálogo nacional convocados para buscar una solución al conflicto en las regiones anglófonas del país en función de su "viabilidad".

El veterano mandatario convocó un diálogo nacional encabezado por su primer ministro, Joseph Dion Ngute, y en el que han participado 600 personas, según el Gobierno, pero que ha contado con la ausencia de los principales líderes separatistas, algunos de los cuales están encarcelados y otros viven en el exilio.

Entre las principales recomendaciones figura la concesión de un "estatus especial" a las regiones Noroeste y Suroeste, de mayoría anglófona y epicentro del conflicto, y la adopción de medidas para garantizar la igualdad del inglés y el francés "en todos los aspectos de la vida nacional".

También se apostó por mejorar las infraestructuras en todo el país y fortalecer la asistencia humanitaria para atender a los desplazados internos --más de 400.000--. Además, se propone un plan para reconstruir las zonas afectadas por el conflicto y la creación de un equipo encargado de mediar "con los miembros radicalizados de la diáspora".

Lo que en 2016 empezaron siendo protestas pacíficas de los habitantes de estas regiones, otrora colonias británicas pero que decidieron unirse al Camerún francés, por su supuesta marginación por parte del Gobierno central, derivó en una dura represión a raíz de la autoproclamación de la independencia de Ambazonia el 1 de octubre de 2017.

Desde entonces, los grupos armados han proliferado y el apoyo a los separatistas, hasta entonces bastante marginal, se ha visto acrecentado. El Gobierno ha respondido mediante una dura represión durante la que las organizaciones de Derechos Humanos han acusado a las fuerzas de seguridad de cometer atrocidades.