Actualizado 13/07/2009 20:01

Caos interrumpe conferencia para nueva Constitución Zimbabue

Por Nelson Banya

HARARE (Reuters/EP) - Una conferencia en Zimbabue para preparar una nueva Constitución se sumió en el caos el lunes cuando la policía anti disturbios debió intervenir en una disputa entre delegados rivales, que subrayó las tensiones dentro de un Gobierno de unidad formado este año.

Pero las autoridades prometieron avanzar con la reunión, que es parte de un proceso que debería conducir a la adopción de una nueva Constitución nacional y a elecciones dentro de dos años.

El caos en la conferencia reflejó las divisiones dentro del Gobierno de coalición formado por el presidente Robert Mugabe y su viejo rival Morgan Tsvangirai en febrero, con el objetivo de poner fin a la parálisis política y revertir una década de crisis económica.

Los zimbabuenses esperan que una nueva Constitución, que remplazaría a la redactada en 1979 antes de la independencia de Gran Bretaña, fortalezca el rol del Parlamento, limite los poderes del presidente y garantice las libertades civiles, políticas y de prensa.

Los problemas entre los delegados del Movimiento para el Cambio Democrático (MCD) de Tsvangirai y el ZANU-PF de Mugabe surgieron durante una declaración de apertura del presidente del Parlamento.

La policía anti disturbios los expulsó del lugar donde se realizaba la conferencia.

El legislador del MCD y jefe del comité parlamentario que conduce las reformas constitucionales, Douglas Mwonzora, dijo a Reuters que la conferencia se reanudaría luego de un acuerdo entre los líderes políticos.

"No podemos ceder ante estos rufianes. Hemos acordado como líderes políticos que la conferencia se reanudará a las 3 pm (1300 GMT)", dijo Mwonzora.

"Los principales miembros de los tres grandes partidos políticos hablarán en la conferencia de hoy", añadió.

Cuando el presidente de la Cámara baja del Parlamento, Lovemore Moyo, del MCD de Tsvangirai, se levantó a dar su discurso de apertura, un grupo de jóvenes comenzó a cantar canciones revolucionarias y los delegados empezaron a pelearse entre ellos.