MÉXICO DF, 2 Dic. (Notimérica) -
El exgobernador de Tabasco Andrés Granier Melo, que se encuentra en prisión acusado de lavado de dinero negro, cuenta con todo tipo de lujos en su celda de la cárcel de Tepepan en la Ciudad de México, donde puede disfrutar de un menú especial, televisión, blue-ray, ordenador portátil y teléfono.
Según informa el diario 'Tabasco hoy', el que fuera gobernador entre 2007 y 2012 de este Estado del sur de México, se encuentra desde el 11 de julio de 2013 en la Torre Médica de la prisión. Allí le protegen seis guardaespaldas, cuidan de su estado de salud dos médicos de cabecera y cuenta con una celda VIP de doce metros cuadrados con pantalla plana de televisión, libros, cama articulada, colchón ortopédico y un sillón reclinable.
Una habitación que bien pudiera parecer la de un hotel, al contar también con baño propio, agua caliente y dos lavabos. Además, el exmandatario sigue vistiendo ropa de marca, aunque del color beige obligatorio en la prisión, sus pijamas son de seda y las sábanas y colchas han sido enviados hasta la celda por su mujer.
Todos los días, sigue la misma rutina, se ducha, afeita y se perfuma con fragancias francesas para recibir a las 8.00 horas el desayuno que como cada día le envía su esposa y que cuenta con café, fruta, jugo, gelatina y pan tostado con queso o dulce de leche.
Antes de la hora de comida disfruta de unos tamales o alguna fruta para después deleitarse con alguna de las mejores piezas de carne del mercado, salmón o mariscos, mientras que para la cena le tienen preparados alimentos más ligeros.
Acusado también de cometer un desfalco de 23 millones de pesos (1.647.000 dólares) del erario público de su Estado, Granier recibe la visita de amigos en el penal, como denuncian algunos testigos, que aseguran que hasta allí se han trasladado los senadores Joel Ayala Almeida y Emilio Gamboa Patrón.
Los guardaespaldas que protegen a Granier han sido contratados por la familia y visten de médicos y enfermeras para pasar desapercibidos en el penal, lo que viene a demostrar las continuas irregularidades que se dan en las cárceles mexicanas, como se viene denunciando desde hace tiempo ante la opinión pública.
También los médicos que le atienden son pagados por la familia a pesar de que, según varios testigos, el que fuera gobernador de Tabasco goza de un buen estado de salud y no tendría por qué estar hospedado en la zona hospitalaria de la prisión. Pero, sin duda, estar en ese lugar le permite disfrutar de un espacio VIP que, de otra manera, no podría conseguir tan fácilmente.
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