SANTIAGO, 17 May. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
El gobierno chileno se prepara para un posible corte total de los envíos de gas natural desde Argentina, aunque expresó su confianza en que la voluntad de las autoridades del país vecino es mantener sus compromisos de exportación.
Las empresas argentinas productoras del combustible, afectadas por una crisis debido a las bajas temperaturas, han privilegiado el consumo interno, lo que ha obligado a recortar las exportaciones a Chile.
Después de que esta semana se registraran las peores interrupciones de suministro desde Argentina a Chile, el secretario ejecutivo de la chilena Comisión Nacional de Energía (CNE), Rodrigo Iglesias, dijo que el Gobierno "quiere estar preparado" ante suspensiones del hidrocarburo que amenacen el consumo residencial y comercial.
"Es necesario precaverse de alguna eventualidad y algún imponderable que escape al control de las autoridades argentinas, que eso puede ocurrir, y por lo tanto es necesario que los consumidores residenciales tengan un respaldo a través de las plantas que se utilizan para estos efectos", dijo.
El ejecutivo señaló que Chile confía en lo expresado por Argentina, en el sentido de cumplir con los contratos. "Hay una voluntad expresa de la autoridad argentina en términos de que, a pesar de lo complejo que está el panorama energético por el lado de ellos, nos van a mandar siempre el suministro que nos permite abastecer a los hogares", comentó.
En tanto, en La Moneda, el ministro portavoz, Ricardo Lagos Weber, dijo que este tema en ningún caso causará un problema bilateral con Argentina. "Nosotros hemos permanentemente hablado de no gasificar las relaciones con la República Argentina y, desde ese punto de vista, vamos a seguir trabajando en esa dirección y es la misma dirección que se está trabajando en Argentina", dijo.