Publicado 29/03/2016 23:50

Chile subraya que la visita de Morales al Silala "no cambia la realidad"

COMITIVA Evo Morales
ABI


SANTIAGO, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, ha subrayado este martes que la visita que el presidente boliviano, Evo Morales, ha hecho al río Silala para demostrar que sus aguas pertenecen a Bolivia "no cambia la realidad" de que es un río internacional.

"Una visita de las autoridades bolivianas al Silala no cambia la realidad, y la realidad es que es un río internacional", ha dicho a su salida de una reunión con el equipo jurídico de la demanda marítima, según informa el diario chileno 'La Tercera'.

Muñoz ha revelado que ha abordado con los expertos "los fundamentos de una contrademanda a Bolivia en caso de que una nueva demanda por el río Silala se llegara a concretar" ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), donde ya se enfrentan por una salida soberana al océano Pacífico.

"Hemos discutido la realidad, y la realidad es que es un río internacional, y así lo ha reconocido Bolivia durante más de 100 años y, por tanto, si Bolivia materializa lo que ha anunciado, vamos a contrademandar", ha recalcado.

Morales ha encabezado este martes una expedición hasta Quetena Chico, en Potosí, en la frontera con Chile, donde nace el Silala, "para mostrar al mundo entero que no es un río internacional, sino aguas que salen de los bofedales, por tanto, aguas manantiales".

NUEVO FRENTE

El presidente boliviano amenazó el pasado miércoles a Chile con emprender acciones legales por lo que ha considerado un "uso abusivo y arbitrario" de las aguas del Silala sin que Santiago compense "ni un centavo" a La Paz.

El Silala es un río que nace en Bolivia y recorre Chile hasta verter al océano Pacífico, a cuya cuenca hidrográfica pertenece. La Paz denuncia que su vecino ha desviado las aguas a través de una conducción artificial, mientras que Santiago sostiene que es un cauce natural.

"Siendo Chile y Bolivia países ribereños, el río Silala es un recurso compartido, donde ambas naciones tienen derecho a usar sus aguas de manera razonable y equitativa, según lo establece el Derecho Internacional", esgrime La Moneda.