SANTIAGO, 1 Jun. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, expresó hoy a su par de Suiza, Micheline Calmy-Rey, su malestar por la decisión de ese país europeo de dar asilo a un chileno prófugo de la justicia y que asesinó a un policía en 1991.
En el marco de una rueda de prensa ofrecida en su primer día de visita oficial a Suiza, la mandataria se refirió al caso de Patricio Ortiz, ex integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), grupo escindido del Partido Comunista que optó por la vía armada para combatir a la dictadura de Augusto Pinochet.
Ortiz, quien cumplía una pena de 10 años por asesinar a un carabinero en 1991, escapó de una cárcel chilena de alta seguridad 1996, tras lo cual pidió asilo político en Suiza. Chile pidió su extradición en 1998 y Suiza la denegó, argumentando que en este país sudamericano no había condiciones para garantizar la seguridad del condenado.
"En mi conversación con la presidenta Michelin Calme-Rey yo le he señalado que Chile es un Estado de Derecho y que la situación de refugio otorgado al autor del crimen de un carabinero en periodo de democracia, es muy difícil de explicar en nuestro país", dijo Bachelet tras el encuentro privado de ambas mandatarias.
"Creemos que tenemos todas las condiciones para juzgar y para mantener en prisión, considerando todos los derechos de un prisionero como lo hacemos con muchos otros", dijo Bachelet respecto del asilado.
La presidenta anfitriona, a su vez, respondió que Ortiz no ha recibido asilo político, sino que está casado con una ciudadana suiza y tiene una hija de esa nacionalidad. "Suiza ve a Chile como un país de derecho", dijo Calmy-Rey.