SANTIAGO, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Corte Suprema de Chile emitió este viernes una sentencia inédita al catalogar la tortura como un crimen de lesa humanidad, tras condenar a dos ex militares de la dictadura por la muerte de 17 personas que fueron detenidas al inicio de la dictadura del general Augusto Pinochet.
La sala penal del Supremo decidió, por tres votos a favor y dos en contra, que las torturas son un "crimen de lesa humanidad" y, por tanto, son "imprescriptibles e inamnistiables".
Los ex militares fueron acusados de ser responsables de la muerte de 17 personas que estuvieron recluidas en la Academia de Guerra de la Fuerza Aérea de Chile (FACH) entre el 11 de septiembre de 1973 --fecha en la que Pinochet dio el golpe de Estado-- y enero de 1975.
Ante esta resolución, el Supremo condenó por los delitos de tormento y rigor innecesario al jefe de la FACH, el general retirado Edgar Cevallos a tres años y un día de prisión, con libertad vigilada. El oficial retirado Ramón Cáceres Jorquera, también fue sentenciado a tres años y un día de cárcel.
Cevallos deberá pagar además una indemnización de 10 millones de pesos chilenos (12.500 euros) a las familias de las víctimas, según señala la sentencia.
El Poder Judicial chileno determinó que, por los hechos investigados, "se llega a la conciencia jurídica que este delito (la tortura) es denominable de lesa humanidad", las cuales eran una política de hostigamiento que implementó entonces el Estado, informó la emisora chilena Cooperativa.