Publicado 26/11/2019 13:59

China.- El ministro de Asuntos Exteriores alemán insta a China a dar una aclaración sobre la reclusión de uigures

BERLIN, 26 Nov. (DPA/EP) -

El ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Heiko Maas, ha instado este martes al Gobierno chino a dar explicaciones tras las nuevas revelaciones sobre la reclusión de uigures musulmanes en el país asiático.

"China tiene que cumplir con sus obligaciones internacionales en términos de Derechos Humanos", ha dicho Maas, durante la celebración del Foro de Política Exterior en la Fundación Koerber.

Maas ha argumentado que es clave que los organismos independientes, incluyendo la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, sean garantes del acceso a las regiones donde vive la minoría uigur.

"Si cientos y cientos de uigures están realmente retenidos en campos, entonces la comunidad internacional no puede cerrar sus ojos", ha asegurado.

El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación publicó el domingo una serie de documentos que, según indicaron, pertenecen al Partido Comunista de China, y que contienen detalles sobre las instrucciones para gestionar los campamentos de detención masivos donde tendrían retenidos a los uigures en el norte de China.

El Gobierno de Pekín reconoce la existencia de estos centros pero sostiene que no son lugares de detención sino de "reeducación" para combatir el extremismo y que el ingreso en ellos es voluntario.

Los documentos filtrados, que cuestionan seriamente la postura oficial de Pekín, incluyen las instrucciones del vicesecretario general del Partido Comunista chino en Xinjiang, Zhu Hailun, entre ellas, que "nunca" se permita escapar a nadie, aumentar la disciplina y los castigos, promover la confesión y el arrepentimiento y promover la "verdadera transformación".

Expertos de Naciones Unidas y activistas denunciaron hace un año que al menos un millón de uigures y miembros de otras minorías étnicas o religiosas habían sido recluidos en centros clandestinos de Xinjiang. Se cree que un millón de personas, en su mayoría uigures, han sido detenidos sin juicio.

La Unión Europea ha expresado esta semana su rechazo a la existencia de estos campos de concentración en China para las minorías y ha instado a Pekín a respetar los Derechos Humanos de los uigures y los tibetanos.