BRUSELAS, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha señalado este miércoles que la intención de reabrir Varosha, una zona militar del norte de Chipre, supone una violación "seria" de los acuerdos de la ONU y dificulta aún más el proceso para solventar la crisis en el Mediterráneo oriental.
En una intervención en el Parlamento Europeo, el jefe de la diplomacia comunitaria ha avisado al Gobierno de Recep Tayyip Erdogan de que este movimiento complica la ya maltrecha situación en la región. La UE ha instado a Turquía a negociar sus disputas marítimas con Grecia y Chipre, bajo la amenaza de adoptar sanciones en diciembre si continúa con las acciones unilaterales.
"Desde luego que esto no ayuda. Por el contrario, esto va a incrementar las tensiones y va a dificultar alcanzar un acuerdo sobre un tema especialmente difícil para todos como es el Mediterráneo oriental," ha asegurado en el pleno de la Eurocámara, después de que un parlamentario chipriota haya mencionado el tema.
El presidente turco acompañó el martes al líder de la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre en el anuncio de que reabrirán este enclave que lleva desde 1974 como zona militar cerrada. La zona en cuestión se encuentra cerca de Famagusta, un antiguo centro turístico antes de que quedara abandonado tras la ocupación y posterior división de la isla.