Actualizado 30/03/2017 06:52

Una Colombia en busca de paz acoge la Cumbre Iberoamericana más despolitizada

   Sólo 12 países de 22 estarán representados al máximo nivel y faltarán los presidentes de Argentina, Brasil, Bolivia y Venezuela

   CARTAGENA DE INDIAS (COLOMBIA), 27 Oct. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández) -

   Colombia acogerá desde este viernes la Cumbre Iberoamericana que, en su edición número 25, se presenta en su versión menos política y con un programa que aspira a atraer la atención de los jóvenes de la región, en quienes se centrarán los debates y acciones que se comprometerán a emprender los países participantes.

   La celebración de esta cita --antes anual, ahora bienal-- que reúne a los líderes de América Latina, España, Portugal y Andorra de manera ininterrumpida desde 1991 tendrá lugar en medio de los intentos del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, de relanzar el proceso de paz con la guerrilla de las FARC tras el rechazo de los colombianos al acuerdo alcanzado en el plebiscito del 2 de octubre. Y coincidirá también con el inicio de las conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

   Pero si los líderes latinoamericanos se movilizaron para acudir en masa a los actos de la firma del acuerdo de paz con las FARC el pasado 26 de septiembre en esta misma ciudad de Cartagena --hasta donde se desplazó el presidente de Cuba, Raúl Castro, que viaja al extranjero en contadas ocasiones-- muchos de ellos no han considerado necesario reafirmar ese apoyo en esta Cumbre Iberoamericana.

   Tampoco los intentos encaminados a despolitizar las cumbres para centrarse en los ámbitos que más unen a la comunidad iberoamericana (educación, cultura y empleo) han conseguido reactivar el interés en estas citas entre buena parte de los dirigentes de la región. Unas de las ausencias más llamativas de este año son las de los presidentes argentino, Mauricio Macri, muy interesado en recuperar la relación con España, deteriorada en el último mandato de Cristina Fernández, o Brasil, Michel Temer.

No habrá ningún país de los 22 que comprenden la comunidad iberoamericana sin representación en la cumbre, pero solo diez enviarán a su jefe de Estado o de Gobierno. Es el caso de España (Rey Felipe VI), Colombia (Juan Manuel Santos), Andorra (Antoni Martí), Chile (Michelle Bachelet), Ecuador (Rafael Correa), Guatemala, (Jimmy Morales), Honduras (Juan Orlando Hernández), México (Enrique Peña Nieto), Panamá (Juan Carlos Varela), Perú (Pedro Pablo Kuczynski), Portugal (que envía a presidente, Marcelo Rebelo De Sousa, y primer ministro, António Luís Santos da Costa) y República Dominicana (Danilo Medina).

   En el extremo contrario, Bolivia y Venezuela son los países que enviarán una representación de menor nivel, ya que en ambos casos será un viceministro (secretario de Estado) el que participe en el programa. Costa Rica, Uruguay y Nicaragua enviarán a sus presidentes, mientras que Argentina, Cuba, Brasil, Paraguay y El Salvador participarán con sus cancilleres (ministros de Exteriores).

VISITA DEL NUEVO SECRETARIO GENERAL DE LA ONU

   Uno de los alicientes que presenta la cumbre tiene que ver con la participación del secretario general electo de Naciones Unidas, el portugués Antonio Guterres, que tendrá ocasión de reunirse con los líderes iberoamericanos y debatir sobre el estado de la región y del mundo en general antes de que inicie su mandato en enero próximo.

   Por segunda vez en la historia de estas cumbres, impulsadas por España y México en 1991, faltará el presidente del Gobierno español, que desde el miércoles se somete a un debate de investidura del que, esta vez sí, espera salir elegido jefe del Ejecutivo. En 2010, José Luis Rodríguez Zapatero también tuvo que cancelar su asistencia a la Cumbre Iberoamericana de Mar de Plata (Argentina) porque debía adoptar una serie de medidas para afrontar la crisis económica que entonces golpeaba con más dureza a Europa.

GIBRALTAR, POR PRIMERA VEZ EN LA AGENDA

   Una de las novedades de la cumbre de Cartagena será el comunicado de apoyo a España en la cuestión de Gibraltar que previsiblemente aprobarán los líderes iberoamericanos al término del encuentro, que concluirá en la tarde del sábado.

   Nunca antes en la historia de estas cumbres España solicitó de sus colegas iberoamericanos un gesto así, similar al que año tras año se tiene con Argentina respaldando, también con un comunicado, su reivindicación sobre las islas Malvinas e instando a Reino Unido a solucionar el contencioso por la vía del diálogo.

   ¿Por qué entonces España pide ahora un respaldo similar en la cuestión de Gibraltar? Porque con la salida de Reino Unido de la UE España ya no se ve obligada a constreñir el contencioso al ámbito bilateral y a los órganos competentes en Naciones Unidas para evitar contaminar la relación con un socio europeo, sino que se siente más libre para elevar la reivindicación a otros foros internacionales, explican fuentes diplomáticas a Europa Press.

   La cumbre de Cartagena, cuyo lema será 'Juventud, educación y emprendimiento', se cerrará también con un Pacto por la Juventud en el que cada país anunciará una medida dirigida a mejorar un aspecto concreto de la situación de los jóvenes iberoamericanos.

   De forma paralela a la cumbre, se han desarrollado y se llevarán a cabo en estos días toda una serie de actividades en las que participarán de manera directa jóvenes de la región, como es el caso del laboratorio ciudadano donde se concretaron proyectos ideados y puestos en marcha por ciudadanos, como la digitalización de la fuente tipográfica de la comunidad indígena Wounaan, en riesgo de extinción en Colombia. Pero también ha habido un seminario de periodismo y talleres de hip-hop.

   Como en ediciones anteriores, también tendrá lugar un encuentro empresarial que pone en contacto a las compañías que operan en la región y en el que tiene previsto participar el Rey Felipe, entre otros líderes.