BOGOTÁ, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
Colombianos y Colombianas por la Paz (CCP) y Marcha Patriótica (MP), organizaciones lideradas por la ex senadora del Partido Liberal, Piedad Córdoba, han expresado su apoyo a la decisión del Gobierno de Juan Manuel Santos de iniciar un proceso de paz con las guerrillas del país.
A través de un comunicado, CCP ha celebrado "que empiece a cristalizar" el trabajo de los defensores de los Derechos Humanos, al tiempo que ha valorado positivamente "los gestos de todas las partes para buscar una salida política negociada al conflicto armado".
Además, la organización humanitaria ha instado a las partes a "realizar todos los esfuerzos, con la generosidad necesaria, para poner fin al conflicto armado, abordando los problemas estructurales que le han dado origen".
Para ello, ha considerado, se deben "sustituir las mentalidades y prácticas excluyentes --como las de exterminio y persecución política-- por las de la inclusión, como el reconocimiento de la verdad histórica".
Asimismo, CCP ha instado a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Unión Europea (UE) y Estados Unidos a respaldar también "la construcción de las posibilidades de un proceso de paz duradero en Colombia".
Por otra parte, el portavoz de MP, Edison Barrera, ha dado la bienvenida al proceso de paz y ha apuntado que la organización política lo recibe "con muchas expectativas", según informa Caracol Radio.
No obstante, Barrera ha considerado que, al margen del conflicto armado, debe abordar otros temas de interés social como el respeto a los Derechos Humanos, la violencia, los problemas de las comunidades rurales, la educación y la sanidad.
DIÁLOGO DE PAZ
Ayer, Santos confirmó, en un mensaje difundido por la televisión y la radio nacional, que su Gobierno ha mantenido "conversaciones exploratorias" con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) "para buscar el fin del conflicto", y abrió la puerta a que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) se uniera a las mismas.
Aunque reconoció los contactos con el grupo armado, el mandatario no confirmó la existencia de un acuerdo entre el Gobierno y la guerrilla para iniciar un diálogo de paz el próximo 5 de octubre en Oslo, tal y como ha revelado la cadena TeleSur.
El ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010) ya desveló la semana pasada que el Gobierno estaba adelantando negociaciones con las FARC en Cuba, lo cual fue desmentido por las autoridades colombianas que incluso llegaron a calificar de "irrespetuosas" estas afirmaciones.
Esta sería la primera vez en más de una década que el Gobierno colombiano se sienta a dialogar abierta y formalmente con las FARC. Durante sus ocho años de mandato, Uribe había condicionado cualquier negociación a la liberación incondicional de todos los secuestrados, al cese de las hostilidades y a la desmovilización de los jefes guerrilleros.
El pasado mes de abril, las FARC decidieron entregar a los últimos diez militares y policías que tenían en su poder desde hacía más de una década y ratificaron su compromiso de no volver a secuestrar. Desde entonces, han insistido en la necesidad de sentarse a conversar, pero Santos ha insistido en que habría negociación si los rebeldes no entregan las armas.