Actualizado 13/04/2010 23:28

Colombia.- Las FARC entregan pruebas de vida de dos secuestrados que piden poner en marcha el intercambio humanitario


BOGOTÁ, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -

La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entregó este martes pruebas de vida del mayor de la policía Guillermo Solórzano y del cabo Salín Antonio Sanmiguel, secuestrados en 2007 y 2008, respectivamente, en las que ambos apuestan por el intercambio humanitario como la única vía para poner fin a su cautiverio.

Los vídeos, grabados el pasado 14 de marzo, llegaron a la sede de la emisora local Caracol Radio, en la localidad de Cali, en el departamento de Valle del Cauca (oeste), en los que se pueden ver y escuchar a los dos oficiales enviando emotivos mensajes a sus familiares y expresando su dolor por estos años de secuestro.

El mayor Solórzano recuerda que ya lleva "1.000 días sin libertad" lo cual "ha sido duro, doloroso y triste, pero también reconfortante en la parte espiritual porque me siento un hombre más fuerte". Su mayor consuelo es poder escuchar a su madre a través de mensajes en la radio que le llenan de "alegría y de fortaleza".

Solórzano dijo que el acuerdo humanitario "es un clamor nacional" así como "un anhelo internacional" para poner fin a su cautiverio y al de todos sus compañeros. "Esperamos con ansias, con esperanzas, con fe que muy pronto con el nuevo panorama político, con las situaciones nuevas que se han dado podamos salir adelante", señaló.

El cabo Sanmiguel, por su parte, pidió a los colombianos que apoyen a la senadora Piedad Córdoba por haber sido "la única que ha podido intervenir" para la liberación de los rehenes. El militar espera que "estos nuevos tiempos que dan en la política" permitan tanto al presidente Álvaro Uribe como al Gobierno entrante ayudar a los secuestrados "a salir de esta selva".

"¡Vamos a ser libres si ustedes señores y señores guerrilleros llegan algún día a un acuerdo!", expresó al referirse al canje humanitario de rehenes por guerrilleros que recientemente ha sido rechazado por el Gobierno de Uribe.

Las FARC proponen desde hace una década el intercambio humanitario de uniformados secuestrados --que ahora suman 22-- por rebeldes presos en las cárceles de Colombia. En los últimos dos años han liberado de forma unilateral a unos 14 rehenes --militares y políticos-- como un gesto para promover este acuerdo.

El mayor Solórzano era capitán de la Policía Nacional cuando fue secuestrado el 4 de junio de 2007 en la zona rural del municipio de Miranda, en el departamento de Cauca (oeste). Mientras que el cabo Sanmiguel fue privado de su libertad el 23 de mayo de 2008, en el Tambo, Tolima (oeste) en medio de un enfrentamiento con el Frente 21 de las FARC en el que murieron cinco soldados.

PAPEL DE LA IGLESIA

Ambos uniformados destacaron el papel "importante" que ha tenido la Iglesia Católica en los intentos de negociaciones entre las FARC y el Ejecutivo. Sanmiguel la describe como el nexo que "ha servido, tanto a la guerrilla como al Gobierno, para unir este grito de libertad desde acá, desde la selva".

También agradecen a Córdoba y al profesor Gustavo Moncayo, padre del cabo Pablo Emilio Moncayo liberado hace unos días, tras haber pasado más de 12 años en poder de las FARC. El cabo Sanmiguel reconoció además la colaboración del mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en las recientes liberaciones unilaterales de rehenes.

"Nosotros aquí (en la selva) morimos todos los días un poquito que no pase mucho tiempo por favor", concluyó por su parte su mensaje el mayor Solórzano.