BOGOTÁ, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, admitió hoy que existen "dificultades" en su relación con Francia por su renuncia a pactar un intercambio humanitario de secuestrados por guerrilleros presos en las condiciones que demandan las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Hemos tenido algunas dificultades con Francia por el tema del acuerdo humanitario, pero (París) ha recibido todas las autorizaciones nuestras para hacer gestiones en búsqueda de ese acuerdo y le hemos dado todas las razones de nuestras exigencias", señaló el mandatario.
El Gobierno francés ha insistido a Uribe en la necesidad de "reanudar el diálogo" con la guerrilla para buscar el canje de 57 rehenes --que incluye a la política colombo-francesa Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y decenas de políticos, policías y militares--, por 500 rebeldes presos. Betancourt cumplirá el próximo viernes cinco años en poder de las FARC.
En declaraciones a la emisora local 'RCN', Uribe aseguró que le encomendó al nuevo ministro de Exteriores, Fernando Araújo, que explique "aún más en Europa" los beneficios de su política de seguridad democrática y fortalecer sus relaciones con el Gobierno de Jaques Chirac.
La huída de Araújo del campamento de las FARC el pasado 31 de diciembre tras seis años de cautiverio durante un enfrentamiento entre militares y guerrilleros alentó a Uribe a buscar el rescate de los secuestrados y sacó a flote la incomodidad que le genera el tema del intercambio humanitario.
En esa ocasión, el mandatario desafió una petición de familiares de secuestrados, del Gobierno francés y de organizaciones no gubernamentales para que desista del rescate militar, al advertir que 2007 será un año "crucial" para estas operaciones del Ejército. Además, pidió ayuda tecnológica para el rescate a Francia, España y Suiza, países que se han ofrecido como intermediarios en la búsqueda de una negociación que lleve a un proceso de paz.