Actualizado 09/04/2013 18:44

Colombia.- Las Fuerzas Armadas niegan cualquier división por la filtración de coordenadas militares

BOGOTÁ, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -

El comandante de las Fuerzas Armadas de Colombia, el general Alejandro Navas, ha negado este martes que existan diferencias dentro de los cuerpos militares después de que el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) haya publicado las coordenadas de las zonas rurales donde se han suspendido las operaciones militares para permitir el traslado de guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a La Habana con el fin de que participen en el diálogo de paz.

Navas ha intentado atajar los rumores de que existe ruido de sables asegurando que "las Fuerzas Militares de Colombia por tradición han sido constitucionalistas y están rodeando al presidente (Juan Manuel Santos) y la Constitución Nacional".

El comandante ha precisado que las investigaciones sobre la filtración de las coordenadas al exmandatario se han centrado en la Fuerza Aérea y la Fuerza de Tarea Conjunta Omega que operan en la región del país en la que se produjo el traslado de los miembros de las FARC.

Santos consideró el lunes como "una inmensa irresponsabilidad" la información ofrecida por Uribe y criticó las palabras de su antecesor de que con el fin del conflicto "habrá impunidad", ya que en las negociaciones, las FARC han aceptado ofrecer una compensación a las víctimas.

Uribe denunció el lunes por la mañana que "lo grave no es revelar que hay operativos, lo grave es suspenderlos para darle más impunidad a los terroristas, a los verdugos de miles de policías y militares".

Desde que Santos anunció su disposición a iniciar un proceso de paz con las FARC, el pasado mes de agosto, Uribe ha expresado su firme oposición al considerar que dialogar con la guerrilla supone dar a sus miembros la categoría de interlocutores válidos, obviando que son terroristas.

A pesar de que Santos fue ministro de Defensa de su Gobierno y su "delfín" en los comicios presidenciales de 2010, en los que Uribe no pudo aspirar a una segunda reelección por prohibición constitucional, las relaciones entre ambos se tensaron con la llegada del actual mandatario a la Casa de Nariño.