Actualizado 11/03/2016 21:20

El Gobierno de Colombia defiende el plebiscito para ratificar los acuerdos de paz con las FARC

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos
GUILLERMO GRANJA / REUTERS


BOGOTÁ, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno ha defendido este viernes la vía del plebiscito para ratificar los acuerdos de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), por lo que ha pedido a la Corte Constitucional que lo apruebe, pese a la oposición de Fiscalía y Contraloría.

"El Gobierno, los ministerios de Interior y de Justicia, radicamos un documento en la Corte Constitucional pidiéndole que avale la convocatoria del plebiscito", ha dicho el titular de Interior, Juan Fernando Cristo, desde Cartagena.

Cristo ha recordado que el presidente, Juan Manuel Santos, "se ha comprometido a convocar a los colombianos a votar 'sí' o 'no' al contenido de los acuerdos de paz" suscritos con la guerrilla, según informa el diario local 'El Espectador'.

"Desde el primer momento en que pensé en iniciar (las negociaciones con las FARC) le prometí al pueblo colombiano que sería el pueblo colombiano, no el presidente, el que tendría la ultima palabra sobre lo que acordáramos en La Habana", ha señalado el propio Santos.

La Casa de Nariño ha reaccionado así a la carta que la Fiscalía ha enviado a la Corte Constitucional para que declare "inexequible" el plebiscito porque la firma de los acuerdos de paz es una facultad exclusiva del presidente que no debe estar condicionada.

"Si bien la participación popular es un elemento valioso en una democracia, esto no puede implicar que las facultades del Presidente de la República para alcanzar la paz tengan que estar condicionadas al veredicto de la ciudadanía", ha dicho.

Además, ha sostenido que en ningún caso este plebiscito debería ser vinculante porque condicionaría "el desarrollo constitucional y legal del acuerdo final para la terminación del conflicto", que "no puede estar sometido a un resultado electoral".

La Contraloría se ha manifestado en el mismo sentido. "La paz es un valor supremo, ubicado (en la Carta Magna) en el capítulo correspondiente a los derechos fundamentales" y, como tal, "es impropio e inaceptable que se someta a cualquier tipo de consulta popular", ha alegado.