Actualizado 18/06/2007 22:37

Colombia.- El Gobierno niega que la campaña electoral de Uribe en 2001 recibiera recursos del narcotráfico o los 'paras'


BOGOTÁ, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Casa de Nariño --sede del Ejecutivo colombiano-- negó hoy a través de un comunicado las declaraciones que a través de la revista 'Semana' hizo el confeso narcotraficante Fabio Ochoa Vasco, quien aseguró que un grupo de paramilitares y narcotraficantes aportaron recursos a la campaña electoral de 2001 del presidente del país, Álvaro Uribe.

"Las directivas pueden demostrar que nunca se solicitó, recibió o se utilizó dineros provenientes de narcotraficantes o paramilitares. Toda la documentación está debidamente revisada y auditada por los revisores fiscales externos de la campaña y se encuentra disponible para quien quiere consultarla", indica el comunicado.

Por ello, la Presidencia solicitó al fiscal general, Mario Iguarán, que investigue las afirmaciones que hace Ochoa Vasco en la entrevista, donde asegura que fue testigo de reuniones con supuestos delegados de la campaña de Uribe, quienes supuestamente recibieron dinero en efectivo de manos del ex jefe 'para' Salvatore Mancuso, informa la emisora Caracol Radio.

"Frente a las informaciones relacionadas con la financiación de la campaña presidencial de 2002, el secretario jurídico de la Presidencia, por instrucciones del presidente de la República, ha solicitado al fiscal general de la Nación que investigue los hechos puntuales que Ochoa Vasco ha referido a la revista mencionada o cualquiera otro que la Fiscalía considere necesario", concluye el comunicado.

El Gobierno también recordó que Fabio Ochoa Vasco nunca formó parte de la mesa de diálogos de Santa Fe Ralito --localidad en la que en julio de 2001 se reunieron políticos, empresarios y paramilitares para firmar un acuerdo en el que se exponía su intención de "refundar el país"-- y que fue incluido a finales de 2005 en la lista de los 12 narcotraficantes más buscados del país.

Precisamente, ayer fue publicado un vídeo grabado en octubre de 2001 y descubierto recientemente que muestra a Uribe durante su campaña presidencial dándole un apretón de manos a Fremio Sánchez Carreño, alias 'comandante Esteban', un jefe paramilitar acusado de varios homicidios y detenido apenas unas semanas después del encuentro.

La oficina del presidente aseguró que era imposible que Uribe supiera en ese momento que Sánchez Carreño era culpable de masacres y que había comandado tomas de poder de los paramilitares. Las autoridades ofrecen ahora una recompensa de 5.000 dólares por Sánchez Carreño.

Según el video, el encuentro ocurrió el 31 de octubre del año 2001, el mismo mes que los paramilitares fueron incluidos en la lista de organizaciones terroristas del Departamento de Estado norteamericano.