BOGOTÁ, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El número de personas que han sido víctimas de las minas antipersona en Colombia desde 1990 ha alcanzado las 10.001, de las cuales el 10 por ciento son menores de edad, según los datos del Programa Presidencial para la Acción Integral contra las Minas Antipersona (PAICMA).
El vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, ha declarado a los medios de comunicación que se trata de una "deshonrosa cifra" de fallecidos y heridos y ha precisado que las víctimas de esa "trampa mortal de los grupos armados ilegales" son 6.222 militares y 3.779 civiles, incluidos 968 menores.
"Queremos ya una Colombia sin más víctimas de minas antipersona y libre de estos artefactos", ha subrayado Garzón, según la Radio Nacional de Colombia.
El vicepresidente ha señalado que el Gobierno, que el próximo octubre comenzará un proceso de diálogo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia para intentar poner fin al conflicto, tiene "muchas esperanzas puestas en un futuro sin más víctimas, sin más violencia y sin más guerra".
Garzón ha exigido a los grupos armados ilegales que dejen de colocar minas antipersona e informen a las autoridades de la ubicación de los campos minados que hay en todo el territorio nacional para poder avisar a la población y desminar esas zonas.
"Solo así podemos despejar de minas las tierras que tanto necesitan los campesinos para el desarrollo de sus comunidades, lo que contribuiría enormemente a la paz", ha destacado.
Colombia es el segundo país del mundo más afectado por las minas antipersona, después de Afganistán, según la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas. El Gobierno calcula que hay más de 100.000 minas, colocadas por las FARC y Ejército de Liberación Nacional (ELN).