MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno colombiano ha reiterado que no fumigará los cultivos ilícitos con glifosato, un herbicida potencialmente peligroso para la salud, aunque ha reconocido que las autoridades discuten la situación ante el incremento de este tipo de cultivos.
Colombia anunció un cambio en su política de lucha contra el narcotráfico al suspender las fumigaciones aéreas de los cultivos de cocaína, en una estrategia que también se ha utilizado en otros países para erradicar los cultivos de amapola, materia prima de la heroína.
La decisión del Gobierno tuvo lugar después de que varios organismos, entre los que se encuentra la Organización Mundial de la Salud, advirtiesen de los riesgos para la salud que conllevan las fumigaciones aéreas con este elemento, potencialmente cancerígeno.
Ante los rumores de que el Gobierno colombiano pueda reanudar estas fumigaciones, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, ha reiterado que no se realizarán aunque ha reconocido la preocupación de las autoridades por el aumento de cultivos ilícitos en zonas como Catatumbo.
"Se discute el tema porque nos preocupa su crecimiento", ha explicado el ministro en declaraciones recogidas por la emisora colombiana Caracol Radio. "El Gobierno aún no ha decidido asperjar los cultivos ilícitos del Catatumbo", ha afirmado.