Publicado 09/07/2019 23:52

Colombia retira a un general del Ejército acusado de corrupción

Ejército de Colombia
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   BOGOTÁ, 9 jul (Reuters/Notimérica)

   Colombia retiró el martes del servicio a un general del Ejército, autorizó vacaciones a otro para que asuma su propia defensa y trasladó de cargo a otro oficial de alto rango en medio de acusaciones de corrupción, informó el ministro de Defensa, Guillermo Botero.

   Se trata del más reciente escándalo en la fuerza después de que en mayo se denunció que el comandante del Ejército, general Nicacio de Jesús Martínez, había ordenado duplicar el número de muertes en combate, capturas y rendiciones de guerrilleros y criminales, acusaciones que fueron negadas.

   En una rueda de prensa, Botero anunció que el gobierno llamó a calificar servicios al general Jorge Horacio Romero, jefe de acción integral, tras las denuncias de que recibió millonarias sumas de dinero de empresarios a cambio de autorizar salvoconductos para el porte de armas cuando se desempeñó como comandante de una brigada en la ciudad de Medellín.

   Así mismo, se autorizaron vacaciones para que asuma su defensa al segundo comandante del Ejército, general Adelmo Fajardo, investigado por presuntamente utilizar recursos de la institución para gastos personales y familiares cuando ocupaba un cargo anterior.

   Mientras el general Eduardo Quirós, jefe de contrainteligencia y señalado de ofrecer ilegalmente pagos a quienes delataran oficiales que estaban filtrando información a medios de comunicación, fue trasladado a otro cargo mientras se define su situación y finaliza la investigación en su contra.

   El Ejército de Colombia, conformado por unos 250.000 efectivos, lidera la lucha contra la guerrilla del ELN, las disidencias de las FARC que se apartaron de un acuerdo de paz y bandas criminales conformadas por antiguos paramilitares dedicadas al narcotráfico y a la minería ilegal.

   Efectivos militares fueron acusados en el pasado por organizaciones como Human Rights Watch de violaciones a los derechos humanos y de complicidad con escuadrones paramilitares, grupos ilegales armados que surgieron en la década de 1980 para combatir a la guerrilla izquierdista. Recientemente varios oficiales han sido acusados e investigados por corrupción.