Actualizado 17/12/2013 20:40

Jefe FARC: "Dificultad para llegar a acuerdos" se debe a declaraciones de Santos

Niega que la ofensiva del Gobierno en estos años haya llevado a las FARC a la mesa de negociaciones

   BOGOTÁ, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, alias 'Timochenko', ha advertido de que "la dificultad para llegar a prontos acuerdos" en el proceso de paz "radica en las confesiones públicas" del presidente, Juan Manuel Santos.

   'Timochenko' ha publicado una carta dirigida a Santos para responder a las últimas declaraciones del presidente, en las que ha insistido en que las Fuerzas Armadas siguen teniendo la orden de abatir a todos los guerrilleros de las FARC, incluido él, a pesar del proceso de paz.

   "Dar de baja o matar (a cualquier miembro de las FARC), especialmente a 'Timochenko', con quien al mismo tiempo no descarta reunirse, siempre que sirva para poner fin al conflicto", ha dicho, aludiendo a la entrevista concedida esta semana por Santos a W Radio.

   Frente a esto, el líder guerrillero ha aclarado al Gobierno colombiano que "las amenazas de muerte y las órdenes de ejecución --sin ninguna clase de juicio-- no sirven para intimidarnos". "Cuando morimos, descansamos", ha subrayado.

   A este respecto, ha recordado que "los combatientes y mandos de las FARC son revolucionarios. "No nos mueve ningún interés personal, ni percibimos ningún salario. Hemos entregado nuestras vidas a la más bella causa del género humano, poner fin a la explotación de unos por otros, a las injusticias institucionalizadas", ha sostenido.

   Además, el cabecilla del grupo insurgente ha advertido de que este tipo de pronunciamientos por parte de Santos "tampoco logran aclimatar el ambiente de reconciliación necesario para concertar una salida" al conflicto armado".

   "No estamos negociando nada que pueda preocupar a los colombianos en materia económica o de aspectos fundamentales de nuestro sistema de gobierno", ha dicho, citando unas declaraciones recientes del jefe de Estado.

   "Los guerrilleros colombianos no estamos defendiendo ningún sistema criminal de gobierno, ni estamos empeñados en sacar adelante una política económica que beneficie a las transnacionales en desmedro del pueblo. Santos sí, y esa es nuestra pequeña gran diferencia", ha contestado.

EL CAMINO HACIA LA HABANA

   En la misma línea, ha indicado que, mientras que "a la oligarquía colombiana, como a sus verdugos de turno, no le interesa disimular su carácter violento ni su lógica de imposiciones", las FARC, aunque no pretenden "hacer la revolución en una mesa de negociaciones", "sí al menos concertar un gran acuerdo" que ponga fin a la lucha armada.

   "Nuestros adversarios sólo insisten en rendiciones", ha denunciado. "Ante las tropas, se repite el estribillo según el cual la Mesa de La Habana no hubiera existido si no fuera por la campaña exitosa cumplida por las Fuerzas Armadas", ha explicado.

   'Timochenko' ha considerado que "resulta una monumental tontería afirmar que se requirieron diez años de guerra, aterradoras cifras de muertos y heridos, miles de millones de dólares y millones de desplazados y de víctimas para obligar a las FARC a sentarse en una mesa de negociaciones".

   "Cuando precisamente allí estábamos al iniciarse semejante demostración de fuerza tan criminal como inútil. Olvidaron que fue el régimen quien se paró de la mesa de negociaciones", ha recordado, en alusión a los anteriores procesos de paz.

   Así, ha argumentado que "en todas sus guerras contra el pueblo colombiano, la oligarquía bipartidista ha apelado a los emplazamientos y amenazas". "El presidente (Guillermo León) Valencia creyó que con izar el pendón nacional en la destruida aldea de Marquetalia había finiquitado el asunto. Y el presidente (César) Gaviria, que con su guerra integral pondría fin al problema en dieciocho meses. El presupuesto de (Álvaro) Uribe fue de dos años, y no lo logró en dos gobiernos", ha relatado.

   Con todo ello, el jefe guerrillero ha indicado que "la cuestión con las FARC --que sin duda celebrarán sus cincuenta años de lucha armada mientras Santos hace las maletas o pugna por su reelección--, es más sencilla de lo que parece".

   "Mucho más fácil que matarnos o desmovilizarnos a todos. Más simple que encarcelar 13.700 compatriotas inconformes. Es abrir realmente las puertas hacia la democracia en nuestro país, desterrar para siempre la manía de imponer las decisiones a la fuerza", ha subrayado.

OPERATIVOS MILITARES

   Por otro lado, ha denunciado que esta ofensiva militar del Gobierno sobre la guerrilla es la que ha llevado a muertes inocentes, por ejemplo, de campesinos y mineros, y la que --según su versión-- le ha permitido encubrir otras, como las de sindicalistas y activistas por los Derechos Humanos.

   "En un país en que el presidente y los ministros de Interior y Defensa acusan de guerrilleros de las FARC a campesinos y mineros, no es extraño que la Policía y el Ejército, en cumplimiento del público mandato, los repelan con granadas y balas, ni que los grupos paramilitares amenacen de muerte a líderes de la oposición o maten a dirigentes reclamantes de tierra o a defensores de Derechos Humanos", ha dicho.