Actualizado 28/07/2010 23:41

Colombia/Venezuela.- Venezuela y Colombia debatirán mañana sobre la crisis diplomática en la reunión de la UNASUR


QUITO, 28 Jul. (Reuters/EP) -

Colombia y Venezuela se sentarán este jueves por primera vez a la mesa tras haber roto sus relaciones diplomáticas, en un encuentro de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), en la que Bogotá insistirá en investigar a su vecino por encubrir a guerrilleros y Caracas se defenderá de lo que cree es una artimaña.

Los ministros de Exteriores de la UNASUR --bloque creado por Venezuela enmarcado en ideas socialistas-- realizarán una reunión extraordinaria en Quito a pedido del presidente venezolano, Hugo Chávez, dentro de sus intentos por buscar apoyo frente a una de sus peores crisis con Colombia.

En la antesala de la reunión, el canciller venezolano, Nicolás Maduro, hizo una gira relámpago por Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina, Chile, Perú y Bolivia exponiendo la necesidad de un proceso de paz con Colombia.

Mientras que Colombia, desde su territorio y ante la Organización de Estados Americanos (OEA), ha insistido en que hay que buscar un mecanismo para corroborar sus denuncias de que unos 1.500 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se refugian en Venezuela con el consentimiento de las autoridades de ese país.

Ante esa acusación formulada el pasado jueves en Washington, Chávez anunció casi de inmediato la ruptura de los lazos diplomáticos con su vecino, con el que comparte una amplia frontera terrestre de más de 2.200 kilómetros, y puso en alerta a sus fuerzas armadas argumentando una defensa a la soberanía.

Algunos líderes sudamericanos han expresado disposición a mediar en la búsqueda de un punto de encuentro para evitar una escalada del conflicto, que llevó a Chávez a reforzar su frontera, un movimiento que para analistas no llevaría a un enfrentamiento armado y al que Bogotá no ha respondido con medidas similares.

Colombia, considerado el mayor aliado de Estados Unidos en Latinoamérica, ha insistido en su denuncia y el canciller de ese país, Jaime Bermúdez, anticipó que en el encuentro regional él mismo expondrá los argumentos del Gobierno de Álvaro Uribe.

¿REUNIÓN INÚTIL?

Pero pocos creen que pueda haber un punto de consenso tomando en cuenta las dispares posiciones y puesto que el Gobierno de Uribe está viviendo sus últimos días antes de pasar el mando a su sucesor, Juan Manuel Santos, con que el Venezuela aspira a tener un trato más amigable a partir del 7 de agosto, cuando asuma la Presidencia.

"Es una reunión inútil desde el punto de vista de solventar el problema. Una reunión práctica para Chávez para hacer un poco de propaganda mediática, (mientras que) Colombia se mantendrá en su postura", ha afirmado el ex canciller ecuatoriano Marcelo Fernández de Córdoba a Reuters. "No saldrá nada más que una exaltación para que los dos países resuelvan (sus disputas)", agregó.

Las relaciones entre Colombia y Venezuela han vivido altibajos. A mediados del 2009, Caracas congeló el comercio bilateral en rechazo a un acuerdo militar entre Colombia y Estados Unidos, que Chávez considera una amenaza para la seguridad del productor petrolero miembro de la OPEP.

UNASUR está conformado por países de izquierda de Sudamérica como Venezuela, Bolivia y Ecuador, y por otra parte por menos radicales como Chile, Brasil, Paraguay, Perú y Uruguay, lo que podría ahondar las diferencias sobre temas espinosos como la seguridad.

"No se vería al ente de Unasur como tal avanzando en la solución de estos problemas. Estos foros han demostrado sus limitaciones para resolver este tipo de asuntos", dijo por su parte el colombiano Alfredo Rangel, analista sobre temas de conflicto y seguridad.

Bogotá pedirá a sus vecinos pasar de las palabras a los hechos y buscar un mecanismos "concreto y eficaz" para evitar la presencia de las FARC en Venezuela y evitar que grupos criminales organizados y terroristas estén en cualquier país.

Caracas, en cambio, presentará una propuesta para sentar mecanismos para la paz, que permita resolver la guerra interna de Colombia contra la guerrilla y el narcotráfico, que según Chávez se ha desbordado amenazando la estabilidad de la región.

El plan venezolano ya tuvo objeciones por parte de Uribe, quien ha dejado claro que "si quieren ayudar a que se supere el problema guerrillero, que entonces le digan a la guerrilla que está allá que se desmovilice".