MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
El estudiante de 17 años Chan Kwok Ching ha sido condenado este lunes a dos años y ocho meses de prisión por llevar varios cócteles molotov en una protesta registrada en la ciudad de Tuen Mun, en la región administrativa especial china de Hong Kong.
Tal y como ha indicado la Justicia china, el joven llevaba consigo tres cócteles molotov y varias sustancias con las que hacer otra veintena de ellos cuando fue detenido el pasado 10 de noviembre, según informaciones de la emisora RTHK.
Chan se ha declarado culpable de haber estado en posesión de sustancias con las que provocar "destrucción" o "dañar propiedades". El adolescente también tenía consigo tres tarjetas Octopus --una tarjeta inteligente recargable que sirve para realizar pagos electrónicos y hacer uso del transporte público--. Según la Fiscalía, estas tarjetas habrían sido utilizadas para ocultar los detalles de sus movimientos por Hong Kong.
La defensa, por su parte, ha alegado que se trata de un adolescente y ha pedido que sea trasladado a un centro de detención para su rehabilitación. Sin embargo, la jueza Amanda Woodcock ha asegurado que el comportamiento del acusado lo convierte en un criminal y no en un manifestante, por lo que "no puede hacer uso de su edad para sacar provecho". Así, ha pedido que el adolescente acuda al psicólogo de forma regular mientras cumple su condena.
Las manifestaciones contra el Gobierno de Hong Kong comenzaron en junio de 2019 por la decisión de impulsar una ley que habría permitido la extradición de sospechosos a la China continental, pero luego derivaron en un movimiento más amplio a favor de la democracia y contra el dominio de Pekín.