Hay 2.257 positivos desde el inicio de la pandemia
BRUSELAS, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades belgas han elevado este viernes a 37 el número de muertes de pacientes infectados con coronavirus, de los que 16 fallecieron en las últimas 24 horas, según el último balance oficial comunicado por el Servicio de Salud Pública que cifra en 2.257 el número total de contagios detectados desde que la pandemia llegó a Bélgica.
La víspera se realizaron más de 2.000 pruebas diagnósticas que permitieron identificar 462 nuevos casos positivos, de los que la mayoría se dieron en Flandes (302), región que se mantiene como la más afectada en Bélgica, por detrás de Valonia y Bruselas Región Capital.
"Quédense en casa, cuiden de sí mismos y cuiden de los demás", ha pedido el portavoz del Centro de Crisis belga, Benot Ramacker, durante la rueda de prensa diaria para dar cuenta de las últimas cifras e insistir en que es fundamental cumplir escrupulosamente las medidas de confinamiento.
El servicio de salud belga "no se encuentra en situación de sobrecapacidad", ha afirmado el microbiólogo y experto del Servicio de Salud Pública Emmanuel André, que ha avisado de que Bélgica se encuentra en "el arranque" de la propagación del Covid-19 por lo que el número de positivos y hospitalizaciones seguirán aumentando en los próximos días y semanas.
El Gobierno federal ordenó el pasado martes el confinamiento estricto de los ciudadanos, por lo que desde entonces solo están permitidos los desplazamientos esenciales y el teletrabajo es obligatorio, aunque sí permite el ejercicio al aire libre respetando la distancia de seguridad para evitar contagios.
Así las cosas, los expertos confían en que estas medidas estrictas ayuden a "estabilizar" la situación en las próximas semanas, si bien insisten en que antes de que se puedan notar los efectos del confinamiento habrá un periodo "intenso" de positivos e ingresos por complicaciones.
"Hay que tener paciencia hasta ver el impacto de las medidas. Son medidas eficaces", ha recalcado André, quien ha considerado que la prevención y los esfuerzos para preparar el sistema sanitario para la llegada de más enfermos permiten decir que Bélgica está "mejor preparada" --con 1.900 camas en cuidados intensivos-- de lo que estuvo Italia cuando llegó la pandemia.
También ha querido incidir en que la "gran mayoría" de los casos de infección no presenta síntomas graves y por tanto no requieren hospitalización, lo que hace que el virus esté "ampliamente presente" en la sociedad y se deba respetar el confinamiento.
Por otro lado, André ha informado de que la media de edad de los pacientes con complicaciones que han necesitado su ingreso en cuidados intensivos es de 60 años en Bélgica, lo que apunta que no afecta únicamente al rango de la tercera edad y confirma que "hay jóvenes en cuidados intensivos, aunque no sean la norma".