PEKÍN, 12 Oct. (DPA/EP) -
La ciudad china de Qingdao realizará un cribado masivo que implicará pruebas de coronavirus a sus más de nueve millones de habitantes, después de detectar el fin de semana doce nuevos casos de COVID-19, en su mayoría relacionados con un hospital de la localidad.
Las autoridades, que prevén culminar todas las pruebas en un plazo de cinco días, han realizado ya test a más de 140.000 personas, en su mayoría trabajadores del sector sanitario. Quieren evitar así un nuevo foco, después de que el país origen del virus haya logrado contener la pandemia.
El Ministerio de Salud de China ha informado este lunes de que se han diagnosticado otros 21 nuevos casos de COVID-19, todos ellos procedentes del extranjero, lo que eleva a 85.578 la cifra provisional de positivos desde el inicio de la pandemia. Al menos 4.634 enfermos han perdido la vida.
Las autoridades chinas han apostado por restricciones localizadas y cribados masivos para contener los focos detectados en estos últimos meses y, pese al repunte generalizado de contagios en otras partes el mundo, el gigante asiático ha informado de un número reducido de casos todos los días --en su mayoría importados--.