ROMA, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un total de 28 de los 210 migrantes rescatados por la ONG Sea-Watch en el Mediterráneo y que se encuentra en cuarentena en un ferry frente a las cosas de Sicilia han dado positivo por COVID-19, según ha informado este miércoles el presidente de esta región italiana, Nello Musumeci.
En un mensaje en su Facebook, Musumeci ha esgrimido este hecho para justificar la decisión con apoyo del Gobierno italiano de poner en cuarentena fuera de la isla a los migrantes rescatados "para evitar que se desarrollasen focos en la isla, sin poder limitarlos y controlarlos".
"Hoy se entiende mejor nuestra petición y quien nos ha acusado casi de racismo hoy se dará cuenta de que teníamos razón", ha sostenido, adelantando que "en las próximas horas se adoptarán procedimientos sanitarios importantes" como medida de precaución. Además, ha reivindicado que se tenga en cuenta a Sicilia a la hora de "adoptar las decisión que deberán tomarse".
La ONG alemana Sea-Watch había rescatado la semana pasada en el Mediterráneo a unas 210 personas en aguas del Mediterráneo y todas ellas, salvo dos que fueron desembarcadas, fueron trasladadas un ferry anclado frente a Puerto Empédocle para cumplir la cuarentena.
Fuentes del Ministerio del Interior consultadas por la agencia AdnKronos han explicado que "los pacientes confirmados y los sospechoso de COVID-19 han sido ubicados en puntos aislados del barco" y se ha instaurado "a bordo una 'zona rosa' a la que el personal solo puede acceder con dispositivos de protección completos".
En cuanto al resto de migrantes, hay activo "un servicio de 'vigilancia' que prevé un control individual dos veces al día en busca de eventuales síntomas", han precisado las fuentes. "Al término del periodo de cuarentena obligatoria, todos los migrantes serán sometidos a un último control preciso para garantizar la plena tutela de la salud pública en el momento del desembarco", han asegurado desde el Viminale.
Italia procedió al cierre de sus puertos para el desembarco de migrantes rescatados en el Mediterráneo con el argumento de que no era un lugar seguro debido a la pandemia de coronavirus, que tuvo al país durante algunas semanas como el más afectado a nivel mundial.