MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -
Corea del Sur ha sumado en el último día casi 250 nuevos contagios, con Seúl como principal foco en el repunte de casos, por lo que las autoridades están estudiando la posibilidad de endurecer las restricciones en el área metropolitana de la capital con el fin de frenar la propagación de la COVID-19
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur, en total ha habido 246 nuevos casos, de los que 235 son de transmisión local, lo que sitúa el total desde el inicio de la pandemia en 15.761.
El país ha registrado por quinto día consecutivo un aumento de tres dígitos y ha sumado en este periodo casi 1.000 nuevos contagios después de que el domingo se registraran 279 infecciones, superando por primera vez desde marzo los 200 contagios. Además, se ha registrado una nueva víctima mortal, por lo que son ya 306 los fallecidos, con una tasa de mortalidad del 1,94 por ciento.
Entre los casos nuevos de trasmisión local, según la agencia de noticias Yohnap, hay 131 infecciones en la capital y 52 en la provincia circundante de Gyeonggi. En total, los contagios vinculados a la Iglesia Sarang Jeil, en el norte de Seúl, ascienden a 383.
Según las autoridades sanitarias, hasta el momento se ha sometido a test a 2.500 miembros de la iglesia, el 15 por ciento de los cuales dieron positivo, y están rastreando el paradero de cerca de 800 feligreses adicionales.
Además, según Yonhap, se ha pedido a todas las personas que participaron en una protesta masiva contra el Gobierno, celebrada el sábado pasado, que acudan a las clínicas más cercanas para someterse a la prueba de la COVID-19, dado que algunos de los feligreses infectados asistieron a la manifestación. De acuerdo con el Gobierno metropolitano de Seúl, hasta el momento hay 438 casos vinculados con la citada iglesia en todo el país.
El domingo, las autoridades sanitarias elevaron a nivel 2 el grado de distanciamiento social en Seúl y sus alrededores debido al aumento de casos, lo que prevé la prohibición de reuniones con más de 100 personas y la asistencia de espectadores a los eventos deportivos.
Sin embargo, las autoridades sanitarias han advertido de que podrían adoptar medidas más estrictas de distanciamiento social a menos que remita el ritmo de contagios en el área metropolitana de Seúl, donde reside casi la mitad de la población del país. En este sentido, el ministro de Salud y Bienestar Social, Park Neunghoo, ha admitido que la situación es grave.