Publicado 15/06/2020 09:37

Coronavirus.- El parón en atención primaria podría matar a más de 50.000 niños en Oriente Próximo y el norte de África

Coronavirus.- El parón en atención primaria podría matar a más de 50.000 niños e
Coronavirus.- El parón en atención primaria podría matar a más de 50.000 niños e - Hani Al-Ansi/dpa - Archivo

MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

La interrupción del sistema de atención médica primaria por la pandemia de coronavirus podría causar en 2020 la muerte de unos 51.000 niños menores de cinco años en Oriente Próximo y el norte de África, según un informe del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El estudio engloba a una decena de países --Argelia, Yibuti, Egipto, Irak, Jordania, Marruecos, Siria, Sudán, Túnez y Yemen-- que suman casi 41 millones de niños menores de cinco años, casi el 75 por ciento de todos los que viven en Oriente Próximo y el norte de África.

De producirse los 51.000 fallecimientos adicionales, supondría un incremento de casi el 40 por ciento en comparación con otros periodos sin COVID-19 --de 133.000 a 184.000-- y la mayor regresión en materia de supervivencia infantil en la región en las últimas dos décadas, han advertido las dos agencias, que han analizado varios factores.

Por una parte, han asumido que el propio sistema y sus trabajadores, sobrepasados por la emergencia sanitaria, pueden verse obligados a desviar esfuerzos y equipos a otras actividades, mientras que las restricciones de movimiento o el miedo a contraer el virus puede hacer que la gente sea más reacia a acudir a su centro de salud.

Esto se traduciría en un menor número de actividades de prevención como la vacunación, el tratamiento de infecciones neonatales y de enfermedades infantiles, la atención durante el embarazo y el parto y los servicios para prevenir un aumento de la emaciación, como se conoce a la delgadez más extrema.

UNICEF y la OMS han pedido por tanto la reanudación "plena y segura" de las campañas de vacunación y los servicios de nutrición, el acceso de la atención sanitaria primaria para los niños, especialmente los más vulnerables, y la inversión en iniciativas de comunicación y participación para dotar de confianza a las familias, entre otras propuestas.