MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha reiterado este viernes la petición de la ONU para un alto el fuego global por la crisis del coronavirus, al considerar que sería un gesto "determinante" para los 250 millones de niños que viven actualmente en zonas afectadas por conflictos.
"Todos estos niños necesitan estar a salvo de la violencia", ha subrayado la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore, quien ha lamentado que casi un mes después del llamamiento lanzado por el máximo responsable de la ONU, António Guterres, la violencia persista en Afganistán, Burkina Faso, Libia, Malí, Siria, Ucrania y Yemen, entre otros países.
Fore, que ha reconocido avances en once países, ha advertido en un comunicado de que "las partes en conflicto no podrán luchar contra el COVID-19 mientras luchan entre sí" y, en el caso de los niños, "un alto el fuego podría significar la diferencia entre la vida y la muerte", tanto por los ataques directos como por los efectos colaterales de los daños a servicios esenciales.
"Mientras la lucha continúa, también lo hace el avance silencioso del COVID-19 contra los niños vulnerables y las poblaciones atrapadas a su paso", por lo que Fore ha llamado a tomar medidas no solo para vencer la enfermedad a corto plazo, sino para "sentar las bases para una paz duradera y sostenible". "Eso significaría todo para los niños y su futuro", ha recalcado.