MANILA, 1 Abr. (DPA/EP) -
Una veintena de personas han sido detenidas este miércoles durante una protesta de residentes de un suburbio de Manila, la capital de Filipinas, para reclamar comida tras semanas de cuarentena que ha dejado a muchos de ellos sin empleo.
Los residentes del distrito de San Roque, en Quezon, a las afueras de Manila, se han concentrado en torno a una autovía próxima a sus chabolas para denunciar que no han recibido ningún paquete de alimentos ni otros suministros básicos desde que el confinamiento comenzó hace más de dos semanas.
Los agentes de seguridad locales y la Policía han pedido a los residentes que volvieran a sus casas, pero estos se han negado, según el informe policial. Como resultado, los policías han disuelto el piquete y detenido a 20 de los manifestantes.
Jocy Lopez, de 47 años y que ha liderado al grupo de protesta, ha denunciado que se han visto obligados a manifestarse porque sus familias pasan hambre. "Estamos aquí para pedir ayuda por el hambre", ha subrayado antes de ser detenida. "No nos han dado comida, arroz o dinero. No tenemos trabajo. ¿A quién se lo pedimos?", ha planteado.
Grupos de activistas han condenado el arresto y han pedido al Gobierno que acelere la entrega de asistencia en efectivo prometida en el marco del programa de protección social de 4.000 millones de dólares para ayudar a las familias y aquellos que han perdido sus empleos en medio del confinamiento.
"Un uso excesivo de la fuerza y la detención no aplacarán los estómagos vacíos de los filipinos que a los que hasta día de hoy se les sigue negando lo prometido (...) ayuda en efectivo para los pobres", ha advertido el grupo de defensa de los Derechos Humanos Gabriela.