Actualizado 19/06/2006 22:58

Crónica UE/EEUU.- Las diferencias sobre Guantánamo ensombrecen la cumbre entre la UE y EEUU

Bruselas y Washington firmarán sendos acuerdos sobre educación superior y lucha contra la piratería


BRUSELAS, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

Las diferencias sobre la prisión de Guantánamo, que ha vuelto a cobrar relevancia después del suicidio de tres presos hace una semana, amenazan con ensombrecer la cumbre entre la Unión Europea y Estados Unidos que se celebra este miércoles en Viena, y a la que asistirá el presidente norteamericano, George W. Bush, el primer ministro austriaco y presidente de turno del Consejo, Wolfgang Schuessel, y el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso.

Los representantes europeos pedirán de nuevo a Bush el cierre de Guantánamo al considerarlo una "anomalía" en la lucha contra el terrorismo y pedirán un juicio justo para todos los detenidos, siguiendo las exigencias de la Eurocámara, que aprobó la semana pasada una nueva declaración en este sentido. No obstante, no tienen previsto ofrecer ningún tipo de colaboración para resolver la situación de los prisioneros, según explicaron fuentes comunitarias, que insisten en que el presidente estadounidense ya ha dicho que su intención es cerrar la prisión tan pronto como pueda.

Las fuentes consultadas no descartaron que durante el debate sobre Guantánamo se plantee también la cuestión de los vuelos de la CIA sobre territorio de la UE, que presuntamente transportaban a supuestos terroristas para llevarlos a países donde podían ser torturados. La cuestión no figura expresamente en el orden del día. Un informe de la Eurocámara ha cifrado en más de un millar el número de vuelos, 125 de ellos en España. El Congreso norteamericano prepara una resolución en la que asegura que estas investigaciones están poniendo en riesgo la lucha contra el terrorismo.

Entre los temas de política exterior que abordarán Bush, Schuessel y Barroso se encuentran la situación en Irán tras la oferta de incentivos presentada por la comunidad internacional para que Teherán renuncie al enriquecimiento de uranio, o la situación en Oriente Próximo y la creación del mecanismo para ayudar a los palestinos sin que el dinero pase por las manos del Gobierno de Hamás. Los europeos esperan además que Washington les pida más apoyo para continuar con la reconstrucción de Irak y Afganistán.

Otro de los puntos de desacuerdo será la negativa norteamericana a incluir en el programa de exención de visado --en el que actualmente participan los antiguos 15 Estados miembros, salvo Grecia, y también Eslovenia--, a los países de la ampliación, pese a las reiteradas peticiones de la UE. Bruselas amenaza con tomar represalias si no se avanza rápidamente en este expediente, que podrían consistir en imponer la obligación de visados a los diplomáticos norteamericanos o al conjunto de los ciudadanos.

También hay preocupación del lado europeo por la creciente tendencia al proteccionismo que está viviendo Estados Unidos, y que se ha cobrado su primera víctima en el acuerdo de liberalización del mercado aéreo, que debería haberse firmado en esta cumbre, pero que se retrasa por la reticencia del Congreso a permitir un mayor control de las empresas europeas en las aerolíneas norteamericanas. Las dos partes reiterarán su compromiso de intentar encontrar una solución antes de finales de año. También se hablará de las negociaciones comerciales en la Organización Mundial del Comercio, que alcanzan una fase decisiva a finales de junio.

COOPERACIÓN ENERGÉTICA

Pese a ello, el presidente de la Comisión insiste en que las relaciones entre europeos y norteamericanos "se han reforzado considerablemente" durante el último año. "Trabajamos continuamente para hacer frente a los desafíos económicos, políticos y medioambientales que se plantean tanto a la UE como a EEUU. Gracias a sus valores e intereses comunes, la UE y EEUU son socios naturales en su papel de liderazgo", afirmó Barroso.

Entre los principales asuntos de la agenda de la cumbre UE-EEUU se encuentra la cooperación para garantizar la seguridad de suministro energético. Se trata de una preocupación compartida, porque entre los dos bloques consumen el 40% de la producción mundial, aunque un ciudadano norteamericano consume justo el doble que un europeo. Se hablará de las tensiones geopolíticas que afectan a los precios del petróleo y de la necesidad de aumentar la eficiencia energética.

En relación con este tema, el encuentro servirá también para lanzar, por primera vez desde 2001, un diálogo de alto nivel entre las dos partes sobre cambio climático, energías limpias y desarrollo sostenible. Estados Unidos se retiró del protocolo de Kyoto tras la llegada al poder de Bush y se niega a fijar objetivos obligatorios de reducción de emisiones de efecto invernadero, por lo que la UE considera doblemente importante este diálogo de alto nivel.

Al margen de la cumbre, la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, la ministra de Asuntos Exteriores, Úrsula Plassnik, y la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, firmarán un acuerdo sobre enseñanza superior y formación profesional cuyo objetivo es promover los intercambios entre la UE y EEUU. Se prevé que puedan beneficiarse 6.000 estudiantes durante 5 años.

Finalmente, el comisario de Industria y Empresas, Günter Verheugen, el responsable de Comercio, Peter Mandelson, y el secretario de comercio norteamericano, Carlos Gutiérrez, lanzarán un plan de acción común UE-EEUU para reforzar los derechos de propiedad intelectual. Este acuerdo prevé una cooperación más estrecha en las aduanas, especialmente en el intercambio de datos.

(EUROPA PRESS INTERNACIONAL)