Actualizado 09/08/2006 15:00

Cuba.- Alarcón dice que la isla está tranquila y en calma y recuerda que el traspaso de poderes a Raúl es "transitorio"

Asegura que si Estados Unidos intenta invadir Cuba se le convertirá en un "infierno" desde el "primer día"


LA HABANA, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, Ricardo Alarcón, ha asegurado que la isla está "tranquila y en calma" después del "golpe y el dolor" inicial tras conocerse el pasado 31 de julio la intervención quirúrgica a la que fue sometido el presidente Fidel Castro.

"La situación política actual de Cuba es de calma, tranquilidad y plena normalidad (...) la experiencia que hemos vivido ha servido para reforzar la voluntad de resistencia de nuestro pueblo y del espíritu de solidaridad humana de los cubanos", afirmó Alarcón desde La Habana.

Alarcón concedió una entrevista a la cadena venezolana 'Telesur', recogida por Europa Press, en la que pidió tanto a los cubanos como a la comunidad internacional "comprensión" por la "discreción" con la que las autoridades de la isla están informando de la enfermedad del dirigente cubano.

Asimismo, el presidente del Parlamento cubano aprovechó la ocasión para recordar que la transmisión del poder en favor de Raúl Castro --decretada por Fidel Castro en su 'proclama' a la Nación dada a conocer el pasado 31 de julio-- es "actualmente transitoria" y así fue "constitucionalmente decidida".

"INFIERNO"

En cuanto a una posible agresión a la isla por parte de Estados Unidos, Alarcón señaló que lo que calificó como "intento de paseo en Cuba" se les va a convertir en un "infierno" desde el primer día. Sin embargo, aseguró que "francamente" dudaba de que Washington vaya a proceder en ese sentido.

Alarcón subrayó que en la actualidad es un momento de "trabajo, lucha y solidaridad" de los cubanos, una población que según dijo "quiere y respeta mucho" a Fidel Castro, en contraste con una "minoría" de cubanos de Miami que "se han agarrado las manos en la puerta" al celebrar su supuesto fallecimiento.

"Yo diría que los cubanos quieren mucho a Fidel y saben de su vida de sacrificio para mejorar la vida de los cubanos. Ellos sintieron un gran golpe y están tristes, eso se palpa en las calles, pero al mismo tiempo, siguiendo las instrucciones de Fidel, continúan trabajando (.) la hora es de lucha, de trabajo, de unidad", afirmó.

El "espectáculo bochornoso" que, según Alarcón, dieron quienes celebraron el deterioro de salud de Fidel, a la que calificó como "una minoría" liderada por autoridades de Miami que ejercen "una dictadura mafiosa", ha contrastado, asimismo, con los mensajes que hacen votos por la recuperación del dirigente cubano, consideró.

Para el presidente del Parlamento, a Estados Unidos "no debe importarle lo que suceda en un país soberano e independiente" como Cuba, al referirse a los recientes anuncios del presidente estadounidense, George W. Bush, y su secretaria de Estado, Condoleezza Rice, sobre un programa de transición para la isla.