Dice que "la mayoría del pueblo cubano" confía en la actuación de sus jueces y tribunales
MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Tribunal Supremo de Cuba, Rubén Remigio Ferro, aseguró este miércoles que el sistema judicial de la isla tiene un "desempeño superior" al de los países que se "autoevalúan como paradigmas de democracia" porque funciona con "aceptable efectividad".
Ferro acotó que, "más allá de imperfecciones y defectos", el sistema judicial y la administración de justicia en Cuba "funcionan con aceptable efectividad como garantes de la tutela y la seguridad jurídica de los ciudadanos" con tendencia a seguir "avanzando", lo que hace que en esa nación caribeña no exista una "grave crisis de confianza de la población" que sí está presente "en no pocos lugares del mundo".
La "transparencia" de los órganos judiciales, además del "carácter abiertamente popular e inclusivo" de sus funcionarios, suponen una "prueba irrefutable" de que el sistema judicial es "una conquista de la revolución", gracias a que tiene "un desempeño superior al que pudieran mostrar aquellos que se autoevalúan como paradigmas de democracia y adalides del derecho", dijo Ferro en la apertura del V Encuentro Internacional Justicia y Derecho celebrado en La Habana.
De esta manera, el titular del Supremo fustigó "las veleidades y turbios" de los órganos judiciales de otros países "donde se pone de manifiesto una evidente prostitución de la profesión por parte de jueces venales que colocan sus togas y sus conciencias al servicio de mezquinos intereses".
El sistema judicial es considerado por la disidencia uno de los puntos más débiles de la revolución que los hermanos Castro han mantenido durante casi 52 años en esa isla donde, según cifras no oficiales, podría haber hasta unos 200 presos políticos que fueron juzgados por tribunales que la oposición denuncia que están al servicio del régimen comunista.
Ferro denunció que estas críticas las promueven los "adversarios del socialismo cubano", liderados por Estados Unidos, que han promovido una "furibunda campaña difamatoria" contra los tribunales de justicia, los procesos y las decisiones judiciales de la isla. "La realidad palpable e incuestionable de lo que en Cuba acontece echa por tierra toda falacia o patraña malintencionada", indicó.
"La mayoría del pueblo cubano muestra confianza en la actuación de sus jueces y tribunales", afirmó el presidente del Supremo, al tiempo que reconoció que "todavía existen deficiencias" que se deben erradicar, sin precisar más detalles.
"Ninguna decisión absurda e irracional debe ampararse en una justificación legal. En materia de justicia, creemos firmemente que las insuficiencias serán siempre más atribuibles a los jueces que a las leyes", explicó Ferro.