Familiares de los prisioneros de conciencia se reunirán el miércoles con funcionarios de la Embajada española en la isla
MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las Damas de Blanco --organización integrada por familiares de los presos políticos-- creen que el Gobierno de España "debe" dar una respuesta por el retardo en las liberaciones de 13 disidentes que han rechazado la oferta de salir de Cuba a cambio de su excarcelación, al tiempo que han expresado su temor de que el régimen castrista se niegue a liberarles.
Según las Damas de Blanco y la oposición en la isla, el plazo para liberar a los 52 prisioneros de la Primavera Negra de 2003 se cumplió el pasado domingo sin que hayan sido excarcelados 13 activistas que rechazaron la oferta de viajar a España, al igual que 39 de sus compañeros que ya se encuentran fuera de Cuba.
Berta Soler, portavoz del grupo, dijo a Europa Press que todavía no se ha pronunciado "ni el Gobierno cubano, ni España, ni la Iglesia Católica" para dar una explicación "sobre las razones por las que se ha incumplido con la promesa de liberar a estos hombres que nunca debieron ir presos".
El pasado 7 de julio la Iglesia Católica en Cuba dio a conocer el compromiso del Gobierno de Raúl Castro de liberar en un plazo de tres a cuatro meses a los 52 prisioneros de la Primavera Negra de 2003 que todavía estaban en prisión.
Soler recordó que este acuerdo es fruto de los diálogos que sostuvo Castro con el arzobispo de La Habana, monseñor Jaime Ortega, y el entonces ministro español de Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, por tanto "España y la Iglesia Católica deberían dar una respuesta, decir a las familias por qué hay todavía 13 (opositores) en prisión".
"Lo que nosotros creemos es que España y la Iglesia Católica deben sentarse con el Gobierno cubano y pedirle cuentas, preguntarle por qué no han cumplido con el acuerdo porque no es un asunto sólo de Castro, sino también de España y el Arzobispado, porque también participaron en las conversaciones", explicó Soler en entrevista telefónica.
"UNA BURLA AL MUNDO"
Por su parte, Laura Pollán, otra de las portavoces de las Damas de Blanco, aseguró que con esta actitud el régimen de Castro se está "burlando de la Iglesia Católica, de España, de la Unión Europea y del mundo" porque "no está cumpliendo con la promesa que hizo públicamente".
"El pueblo cubano está acostumbrado a que le mientan, pero jugar con la Iglesia Católica y con todos los países es una burla", expresó Pollán en entrevista telefónica a Europa Press.
Las Damas de Blanco concertaron una entrevista con funcionarios de la Embajada de España en La Habana y esperan concretar encuentros con representantes del Arzobispado y de la Unión Europea, para expresarles su "preocupación" ante la posibilidad de que los prisioneros de conciencia no sean excarcelados.
La semana pasada miembros de esta agrupación se reunieron con un consejero de la legación diplomática española en la isla quien les dio "palabras de aliento y dijo que tenía la certeza de que Cuba iba cumplir y los iba a excarcelar", indicó Pollán.
Los 13 disidentes que aún quedan en prisión --entre los que se encuentran los maridos de Pollán y Soler-- han rechazado la propuesta de salir de la isla alegando que "no quieren ser desterrados y lo que vemos es que con esta actitud, el Gobierno (cubano) esta forzando su deportación, para que acepten ir a España", explicó la activista.
IGLESIA CONFÍA EN LA LIBERACIÓN
El portavoz de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, monseñor José Félix Pérez, expresó su confianza de que finalmente el régimen castrista cumplirá con lo pactado y liberará a los opositores que se negaron a viajar a España.
"Estamos a la espera y deseando que se tomen las mejores decisiones para aliviar esta zozobra", dijo Pérez a Reuters. "El hecho de que todavía permanezcan 13 personas en prisión (...) hace pensar que deben ser liberados próximamente de acuerdo con aquella promesa", añadió.
PRESIÓN INTERNACIONAL
Para Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), la "presión internacional" será fundamental para lograr la excarcelación de los 13 prisioneros de conciencia --adoptados por Amnistía Internacional-- que no quiere abandonar Cuba.
"Todo esfuerzo viable y fructífero debe hacerse desde el exterior, con apoyo de la Unión Europea", afirmó Sánchez en declaraciones telefónicas a Europa Press. "La opinión pública internacional debe pronunciarse y ejercer presión, porque en Cuba estamos atados de pies y manos", insistió.
Sánchez consideró que la "dilación" de la liberación de estos 13 disidentes es una "medida de castigo y el común denominador" del Gobierno cubano "con respecto a los presos políticos" en la isla. "Es el castigo por disentir, por pensar distinto", lamentó.
Asimismo, criticó la postura "tan flexible" de España de recibir a presos "que han empleado la fuerza o la violencia", los cuales no estaban en la lista de los 52 opositores de la Primavera Negra. "Cuba ha aprovechado esto para meter en el saco a quien le convenga sacar del país", acotó.
Una docena de presos cubanos viajaron a España en octubre tras ser liberados pese a que no son prisioneros de conciencia y no están en el grupo de disidentes que prometió excarcelar el Gobierno en julio.