Actualizado 17/10/2008 22:21

Cuba.- Las esposas de dos de los cinco cubanos detenidos en EEUU, acusados de espionaje, piden su liberación en Bruselas

BRUSELAS, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

Adriana Pérez y Olga Salanueva, las esposas de Gerardo Hernández y René González respectivamente, dos de los cinco ciudadanos cubanos encarcelados en Estados Unidos desde septiembre de 1998 acusados de "conspiración para cometer espionaje" por Washington, reclamaron hoy en Bruselas, su puesta en libertad. Asimismo, reclamaron que las autoridades estadounidenses respeten su derecho a visitarlos en la cárcel, tal y como reconoce la Constitución estadounidense, y les expidan visados para ello.

Ambas denunciaron que los juicios contra sus consortes estuvieron "llenos de irregularidades" desde el "punto de vista jurídico", motivo por el que, a pesar de que sus sentencias condenatorias fueron ratificadas por los tres jueces que llevan el caso en la Corte de Apelación del Circuito 11 de Atlanta (Florida), el pasado junio de 2008, pese a que "los jueces reconocen que no hubo ni obtención ni transmisión de información secreta", han apelado de nuevo sus casos en la máxima corte de Miami, que todavía debe emitir su fallo.

Hernández está condenado a dos cadenas perpetuas y otros 15 años de cárcel, mientras que González cumple una condena de 15 años por presuntos delitos de espionaje. Sin embargo, La Habana esgrime que los cinco presos cubano están encarcelados por "luchar contra el terrorismo" de Estados Unidos. Los otros tres cubanos condenados son Antonio Gerrero y Ramón Labañino, condenados a cadena perpetua, y Fernando González, condenado por su parte a 19 años de prisión.

A pesar de reconocer la posibilidad de recurrir en última instancia a "una corte internacional", Adriana Pérez recalcó que resulta poco probable un tribunal así "condene a Estados Unidos". "No creemos que en una Corte Internacional se pueda condenar a Estados Unidos", motivo por el cual reclaman que, al menos, se les reconozca el derecho de visitar a sus esposos en prisión. "Es lo único que nos queda", recalcó.

En este sentido, ambas denunciaron que el Gobierno estadounidense se niega a concederles visados para poder visitar a sus esposos. Olga lleva ocho años sin ver a su marido, mientras que Adriana lleva diez años sin ver al suyo. Estados Unidos, que a su juicio ha impuesto "el silencio" del caso en la prensa, ha concedido en la última década 100 visados para las cinco familias de forma que sólo han podido realizar cuatro visitas en todo este periodo.

Las consortes, que participarán este fin de semana en el tercer encuentro de residentes cubanos en Europa, el 18 y 19 de octubre, en la Universidad Libre de Bruselas, aprovecharán la ocasión para lanzar una campaña de apoyo a la liberación de sus maridos. La semana que viene, llevarán su campaña hasta la sede de la Eurocámara en Estrasburgo (Francia).