ESTRASBURGO (FRANCIA), 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El 'número dos' de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo, Ramón Jáuregui, subrayó hoy que el PSOE no ha cambiado de opinión sobre Cuba y que sigue "pensando que hay razones sobradas para replantear una estrategia que no ha sido eficaz" para promover la democratización en la isla.
"La revisión no es sólo posible, sino deseable", dijo Jáuregui a Europa Press, recordando que tanto Estados Unidos, como la Organización de Estados Americanos (OEA) o países latinoamericanos como Brasil han optado por esta vía.
"Radicalmente no", recalcó preguntado sobre si los socialistas españoles han renunciado a promover cambios en la posición común de la UE que, desde 1996, condiciona cualquier avance en la relación con Cuba a que se produzcan mejoras en materias de Derechos Humanos.
Jáuregui dio tres razones por las que los socialistas rechazaron hoy en el Pleno del Parlamento Europeo una enmienda de Izquierda Unitaria Europea (UEN) que apoyaba los esfuerzos del Gobierno español por la "retirada absoluta" de la posición común europea.
En primer lugar, explicó que este asunto no era el objeto del debate de hoy, centrado en una resolución de condena a la muerte del disidente cubano Orlando Zapata, tras 85 días en huelga de hambre. En este sentido, el eurodiputado incidió en que el PSOE estaba "empeñado en conseguir el máximo consenso en una condena a la dictadura y una expresión de solidaridad con los presos de conciencia".
Por eso, añadió, el PSOE "había excluido expresamente cualquier referencia a la posición común", porque sabe que es un objeto de división entre los grupos políticos.
En segundo lugar, apuntó que por "lealtad" entre los grupos que habían negociado la resolución (la mayoría de la Cámara), no podían apoyar una enmienda de un grupo que no suscribía el grueso de la resolución.
MORATINOS QUIERE CONSENSO
Por último, insistió en el argumento de que la enmienda no se corresponde enteramente con el objetivo del Gobierno español declarado por el ministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos, que es "fraguar un nuevo consenso para revocar la posición común".
Jáuregui no quiso juzgar la "intencionalidad" de los diputados de UEN (la presentó el español de IU Willy Meyer) al introducir esta enmienda pero la lamentó argumentando que "esas posiciones testimoniales sólo perjudican" la intención de fondo del Gobierno español y, además ha "generado una confusión inconveniente".
"Ha dado la sensación de que se ha rechazado este asunto --el objetivo de revisar la posición común-- cuándo en realidad esto no ha sido el objeto del debate", concluyó.