Actualizado 30/11/2009 19:00

Cumbre Ib.- Arias insta a reconocer los comicios en Honduras como se hizo en el pasado con procesos organizados por dict

El Nobel de la Paz defiende que no sean los hondureños los que paguen el precio del aislamiento y pide a Lobo que reconcilie el país

ESTORIL (PORTUGAL), 30 Nov. (de las enviadas especiales de EUROPA PRESS, Leyre Guijo y Beatriz Fernández) -

El presidente de Costa Rica y premio Nobel de la Paz, Oscar Arias, ha instado hoy a sus colegas iberoamericanos reunidos en Estoril a que reconozcan las elecciones de ayer en Honduras y al Gobierno que salga de ellas como se hizo en el pasado con procesos electorales organizados por dictaduras militares y que sirvieron de transición a la democracia.

En rueda de prensa en el marco de la XIX Cumbre Iberoamericana, el artífice del acuerdo de San José, que sentó las bases del pacto alcanzado en octubre por el presidente depuesto, Manuel Zelaya, y el de facto, Roberto Micheletti, Arias defendió que no sean los hondureños los que paguen el precio de un aislamiento mayor del país.

"Costa Rica aspira a reconocer las elecciones si son transparentes, si no hay acusaciones de fraude y si los observadores que han participado nos certifican que pueden aceptarse o deben aceptarse", señaló Arias, quien dijo que aprovechará el encuentro más privado que mantendrán los líderes iberoamericanos esta tarde, sin la presencia de sus delegaciones, para intentar convencerles de que ésa es la mejor opción para el pueblo hondureño.

Arias aseguró que es el pueblo hondureño el que le anima a abogar por el reconocimiento. "Es un pueblo que vivió una guerra en 1969, que en 1998 fue devastado por el huracán 'Mitch' y que no se merece ahora un 'Mitch' político". "No reconocer el proceso electoral y al futuro gobierno es hacerle mucho daño al pueblo hondureño", advirtió al subrayar que el 20 por ciento del presupuesto del país procede de la cooperación internacional, suspendida tras el golpe del pasado 28 de junio.

El presidente costarricense, que se definió como "demócrata convencido", reconoció que todos los países iberoamericanos hubieran preferido que los comicios de ayer se hubieran producido con Zelaya restituido, pero aunque "se hizo todo lo que se pudo" para revertir el golpe y restablecer el orden constitucional no fue posible "por la intransigencia del Gobierno de facto".

En este escenario, argumentó que lo "lógico" es que la comunidad internacional actúe como lo hizo en el pasado, cuando "regímenes de facto" que llegaron al poder "por medio de las armas" --citó los casos de Argentina, Brasil y Chile, entre otros-- organizaron "una transición hacia la democracia". "Así fue en el pasado y así debe ser ahora", manifestó, porque "el precio que se paga no aceptando el resultado de las urnas es mayor" que pidiendo a un presidente electo que trabaje por la "reconciliación de la familia hondureña".

El Nobel de la Paz sostuvo que el intento de revertir el golpe de Estado -destacó que nunca antes en la historia de América Latina se intentó hacer algo así-- forma parte del "pasado" porque hoy Honduras ha "amanecido" con una "nueva realidad" y un "nuevo actor, el presidente electo", al que hay que "exigirle" que dialogue y luche por la "reconciliación del pueblo hondureño".

DOBLE MORAL CON IRÁN Y AFGANISTÁN

Arias pidió también que no haya una "doble moral", puesto que varios países iberoamericanos que no citó sí han reconocido las elecciones en Afganistán e Irán, a pesar de que no fueron "ni limpias ni transparentes". Señaló que en el propio continente ha habido "quejas de fraudes y falta de transparencia"en algunos comicios, con los que no ha habido el mismo "celo" que con Honduras. Y advirtió de que las elecciones en América Latina no son "perfectas" y puso como ejemplo la situación en Colombia, donde "siempre se elige bajo las armas" por el conflicto reinante en el país.

DIVISIÓN EN IBEROAMÉRICA

Preguntado por las perspectivas de que los líderes iberoamericanos alcancen un consenso sobre el reconocimiento de los comicios hondureños, admitió que "hay posiciones encontradas", con gobiernos que creen que "no es lo más conveniente reconocer al nuevo gobierno".

Sin embargo, Arias subrayó que las elecciones de ayer se convocaron antes del golpe y que los partidos escogieron a sus candidatos mucho antes de que Zelaya fuera expulsado del país. Llamó la atención sobre la tasa de participación, que ha estado "por encima del 55 por cierto", según la Organización de Estados Americanos (OEA), y ha roto la tendencia hacia un mayor absentismo en convocatorias anteriores. "El pueblo acudió a las urnas porque quiere ver si puede pasar esta página negra y triste" de su historia, añadió.