Publicado 09/12/2014 17:58

Cumbre Ib.- Los líderes iberoamericanos comienzan su segunda jornada de debate con un desayuno 'retiro'


VERACRUZ (MÉXICO), 9 Dic. (de los enviados especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández y Víctor Usón) -

Los líderes iberoamericanos han comenzado este martes su segunda y última jornada de debate con un desayuno 'retiro' en el que estarán a solas, sin la presencia de ningún ministro ni miembros de delegación, lo que permite que hablen de una manera más abierta de los temas que ellos quieran poner sobre la mesa.

Este encuentro en formato más familiar, que en años anteriores tenía lugar a la hora del almuerzo, se lleva celebrando desde la Cumbre Iberoamericana de Chile en 2007 y es el acto de la Cumbre que más valoran las distintas delegaciones, si bien su contenido apenas trasciende a los medios de comunicación.

A esta segunda jornada de la cumbre asisten el Rey de España y el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy; el presidente de México y anfitrión del encuentro, Enrique Peña Nieto; el presidente y primer ministro de Portugal, Anibal Cavaco Silva y Pedro Passos Coelho; el primer ministro de Andorra, Antoni Martí, y los presidentes de Costa Rica, Luis Guillermo Solís; Chile, Michelle Bachelet; Paraguay, Horacio Cartes; Perú, Ollanta Humala; Colombia, Juan Manuel Santos; Uruguay, José Mujica; Ecuador, Rafael Correa; Guatemala, Otto Pérez Molina; y Panamá, Juan Carlos Varela.

Faltan a esta XXIV Cumbre Iberoamericana los presidentes de Argentina, Brasil, Cuba, Bolivia, Venezuela y Nicaragua. También ha causado baja el líder salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, que llegó el domingo a Veracruz pero se marchó apenas 24 horas después tras sufrir "una leve descompensación", según informó su Gobierno.

En esta segunda jornada de la cumbre, los jefes de Estado y de Gobierno de América Latina, España, Andorra y Portugal, los líderes iberoamericanos tienen previsto lanzar varias iniciativas destinadas a facilitar la movilidad de estudiantes, profesionales e investigadores por la comunidad iberoamericana, pero también de trabajadores entre empresas.

Además, deben aprobar un nuevo reparto de cuotas a la Secretaría General Iberoamericana (Segib), el órgano con sede central en Madrid que sirve de apoyo a la organización de las cumbres y da seguimiento a los programas de cooperación que en ellas se aprueban.

Los países latinoamericanos aceptarán aumentar su cuota del 30 al 35 por ciento durante 2015 y 2016, para que la Península Ibérica (España, Portugal y Andorra) baje la suya del 70 al 65 por ciento. El plan es que en 2017 se vuelva a revisar el reparto de cuotas para pasar a un 60% (Península Ibérica), 40% (América Latina).

De esta manera, en el horizonte de 2018 España se ahorraría unos 400.000 euros en su cuota a la Segib, que en la actualidad asciende a unos 4 millones de euros. También está previsto que los líderes aprueben descentralizar esta organización, para que sean las oficinas regionales las que asuman parte de la carga de trabajo que se lleva en la actualidad en Madrid.

Se avanzará así en lo que la nueva segib, Rebeca Grynspan, denomina una relación "más horizontal", "más de igual a igual" entre la Península Ibérica y América Latina, al tiempo que demuestra que todos los países latinoamericanos, en mayor o menor medida, apuestan por mantener vivo el espacio de concertación iberoamericano.

COLOMBIA EN PAZ, PRÓXIMA CITA

La cumbre de Veracruz es la última que se celebrará con periodicidad anual. La próxima cita será en Colombia en 2016 pues estas citas pasarán a ser bienales y se alternarán con las cumbres entre la UE y el bloque de América Latina y el Caribe.

En la cena oficial que los líderes celebraron en la noche del lunes, el anfitrión de la próxima cita, el colombiano Juan Manuel Santos, ha confiado que para 2016 pueda recibir a sus colegas "en un país en paz" si fructifican las negociaciones entabladas por su Gobierno con la guerrilla de las FARC, reanudadas en los últimos días, tras una interrupción derivada del secuestro de un general del Ejército colombiano.

Santos ha agradecido a sus homólogos la resolución de apoyo al proceso de paz en Colombia que aprobarán los jefes de Estado y de Gobierno de los países iberoamericanos en la Cumbre y ha hecho un llamamiento para que esta comunidad de naciones creada en el año 1991 mantenga la unidad para lograr así el progreso de todos.