Actualizado 30/10/2008 23:15

Cumbre Ib.- Los líderes iberoamericanos pedirán una participación "universal y equitativa" en la solución de la crisis

Expresarán su "determinación" de contribuir activamente a la transformación profunda de la arquitectura financiera internacional


SAN SALVADOR, 30 Oct. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández) -

Los jefes de Estado y de Gobierno iberoamericanos reunidos en El Salvador reivindicarán hoy una "participación universal, democrática y equitativa" en el debate y solución de la actual crisis financiera internacional, según el borrador de comunicado especial que prevén adoptar en esta Cumbre Iberoamericana.

Los líderes iberoamericanos perfilarán los últimos detalles de esa declaración en el encuentro privado, conocido como 'retiro', que iniciaron a partir de las 15.00 horas (22.00 en la España peninsular) y al que no asiste ningún miembro de la delegación, aparte de los jefes de Estado y de Gobierno, ni siquiera los ministros de Exteriores.

Allí tendrán la oportunidad de debatir la propuesta que ha hecho Venezuela para que se convoque "con urgencia" una reunión de jefes de Estado y de Gobierno, en el marco de Naciones Unidas, ante la gravedad de la crisis financiera, y que está por ver si se introduce finalmente en el comunicado.

Según el proyecto de declaración, los líderes expresarán su "determinación de participar y contribuir activamente en un proceso de transformación profunda y amplia de la arquitectura financiera internacional, que establezca instrumentos de prevención y respuesta inmediata ante futuras crisis y garantice una regulación eficaz de los mercados de capitales".

También reafirmarán su "compromiso" a la hora de adoptar "las medidas necesarias para proteger el empleo y la inversión, garantizar la disponibilidad de financiamiento para las actividades productivas e impulsar políticas sociales que beneficien en particular a los sectores más vulnerables de sus sociedades".

Aunque los líderes iberoamericanos reconocen que varios países de la comunidad están "en mejores condiciones que en el pasado" para hacer frente a la crisis financiera, advertirán de que "no deben subestimarse sus potenciales efectos sobre el sector real de la economía, ni sobre la estabilidad política y social de la región".

También prevén recordar la "responsabilidad del sistema financiero de los países desarrollados en la actual crisis" y la "urgencia de una conclusión satisfactoria y equilibrada para las negociaciones multilaterales para la Ronda de Doha, tomando plenamente en consideración los intereses de los países en desarrollo, eliminando las prácticas distorsionantes, especialmente en el sector agrícola, y que afectan a los países en desarrollo".