Actualizado 30/11/2009 22:35

Cumbre Ib.- La mayoría de países iberoamericanos se mantiene firme en reclamar la restitución de Zelaya, según canciller

Rodas afirma que Zelaya está dispuesto a dialogar con Lobo en la búsqueda de un gran acuerdo nacional para la restitución democrática


ESTORIL (PORTUGAL), 30 Nov. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández) -

La mayoría de países iberoamericanos se mantiene firme a la hora reclamar la restitución del presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, ha afirmado este lunes su canciller, Patricia Rodas, que señaló que sólo Panamá, Perú, Costa Rica y Colombia han variado su posición probablemente por "seguidismo" de la política de Estados Unidos.

En rueda de prensa en el marco de la XIX Cumbre Iberoamericana que arrancó ayer en Estoril, subrayó que la "comunidad internacional en su mayoría sigue firme y respaldando absolutamente la necesidad del retorno al orden constitucional y democrático". Avanzó además que entre los líderes iberoamericanos reunidos en Portugal se va generando un "consenso" sobre seguir reclamando la vuelta a la "institucionalidad democrática", lo que pasa por la restitución del presidente depuesto Manuel Zelaya.

En su opinión, el comunicado sobre Honduras en el que trabajan los líderes no se pronunciará sobre las elecciones de ayer, aunque sí dirá que ha conocido informes al respecto. Rodas adelantó que en los debates que los líderes han mantenido hasta el momento ha surgido la intención, apoyada por España, entre otros, de crear una "plataforma iberoamericana" que haga todos los esfuerzos necesarios para alcanzar un "gran consenso nacional" en Honduras que permita "retornar al orden democrático".

Rodas destacó que Brasil se mantiene "firme" en su posición de condenar el golpe, pedir la vuelta al orden constitucional y no reconocer los resultados de un proceso electoral "ilegal", lo que no significa no reconocer que existen "actores políticos reales", considerados "independientemente" de unas elecciones que no ha legitimado ni el pueblo hondureño ni la comunidad internacional.

"El proceso electoral es espurio, ilegal e inaceptable, pero los actores políticos, al igual que los del los movimientos social y popular son reales y deben ser parte de cualquier acción en la que se tengan que sentar a dialogar todos los sectores de la población. Pero ello no legitima un proceso electoral producido para dar continuidad a la ruptura de las instituciones democráticas", insistió.

Remarcó asimismo que ese diálogo nacional debería liderarlo Zelaya y que en ningún caso incluiría a los responsables del golpe, "los militares y grupos de poder para los que trabaja Micheletti", porque ya no pueden ser parte de una "solución" y "serán sometidos a un proceso en la jurisdicción internacional a través de la creación de un tribunal ad hoc".

Preguntada si Zelaya aceptaría hablar con el vencedor de los comicios del domingo, Porfirio Lobo, señaló que el presidente depuesto "conversa de forma cotidiana con todos los actores políticos y sociales", si bien precisó que estos actores no pueden "ignorar el liderazgo y la legitimidad de Zelaya". A pesar de que Rodas acusó a Lobo de haber participado en la "farsa electoral" de ayer y de temer el enfrentamiento con la "casta militar", indicó que eso no impide que los dos políticos hablen.

La canciller dejó claro que Zelaya no aceptará ningún acuerdo para su restitución que sirva para "blanquear el golpe de Estado militar" y consideró que si se forma esa gran mesa de diálogo nacional será ésta la que determine si se deben celebrar nuevas elecciones.

Rodas añadió que el comunicado en el que trabajan los líderes iberoamericanos también pide el "cese a la violación de los Derechos Humanos y a la persecución política que sufren hoy los defensores de la democracia y los funcionarios constitucionales del Gobierno de Zelalaya", así como el fin del "hostigamiento" a la Embajada en Brasil y las misiones diplomáticas de Argentina, España, Venezuela, Cuba y Nicaragua en Tegucigalpa.