Actualizado 12/05/2006 10:38

C.Viena-Dirigentes europeos e iberoamericanos insistirán en su asociación estratégica pese a escasos avances comerciales


VIENA, 12 May. (EUROPA PRESS) -

Un total de 26 jefes de Estado y Gobierno europeos y 20 del continente americano se darán cita hoy en el centro de congresos de Viena para la IV Cumbre UE-América Latina y Caribe con el fin de confirmar el interés estratégico entre ambas regiones. Los mandatarios llegaron ayer a Viena y participaron en una cena ofrecida por el canciller, Wolfgang Schuessel. Hoy participarán en varias sesiones de trabajo, a partir de las 9:00 horas.

Tras una sesión plenaria en la que intervendrá el secretario general de la ONU, Kofi Annan, los jefes de Estado y Gobierno quedarán divididos en tres mesas para agilizar el debate. Unicamente estarán todos juntos a la hora del almuerzo y en el plenario de clausura. Schuessel también ha previsto una cena para todos los participantes hoy viernes.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, comienza hoy la jornada con un desayuno con el presidente de México, Vicente Fox, antes de acudir a la sede de la Cumbre. A Zapatero, la presidencia austriaca le ha pedido que participe en una de las mesas de la tarde para hablar de lucha contra la desigualdad, la pobreza y la exclusión, junto a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet.

Por la tarde, el jefe del Ejecutivo español tiene previsto un encuentro bilateral con el presidente brasileño, Luis Ignacio 'Lula' da Silva, y se espera que en algún momento se vea con el boliviano Evo Morales, aunque fuentes gubernamentales españolas insisten en que no hay nada cerrado. Zapatero tiene previsto ofrecer una rueda de prensa a las 18:30 horas.

En la Cumbre, la UE tomará la decisión de abrir negociaciones para un acuerdo de asociación --comercial, político y de cooperación-- con los países centroamericanos (Costa Rica, Honduras, El Salvador Guatemala, Nicaragua, Panamá y Belice), pero dejará para más adelante la cuestión de si se negocia o no con la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú), a la espera de que esta organización decida sobre su futuro.

Tampoco habrá avances en la negociación con Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y ahora también Venezuela), estancadas al igual que la Ronda de Doha de liberalización comercial en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Además, la declaración de la Cumbre incluirá un rechazo a las disposiciones extraterritoriales de la ley Helms-Burton estadounidense --que penaliza a las empresas extranjeras que comercien con Cuba--, a instancias del Gobierno cubano y reconoce "el derecho soberano de los países para gestionar y regular sus recursos naturales" y asegura que la UE y América Latina continuarán "reforzando nuestra cooperación para establecer un marco comercial equilibrado y regímenes reglamentariamente más competitivos".

Por el momento, no obstante, no se ha logrado acuerdo para crear una línea específica de créditos en el seno del Banco Europeo de Inversiones (BEI) que duplique, de 2.000 a 4.000 millones de euros, los fondos disponibles para Iberoamérica. Hoy participará en la Cumbre el presidente del BEI, Philippe Maystadt y hablará de la "disponibilidad" para aumentar esas ayudas.

Los actos de la Cumbre terminan esta noche, pero para mañana sábado por la mañana están previstos encuentros subregionales entre la UE, por un lado y, por otro, México, Chile, Mercosur, los países centroamericanos y los del Caribe.

De manera paralela, unas 200 organizaciones de la sociedad civil han convocado en Viena una 'contra cumbre' que comenzó el miércoles y se prolongará hasta mañana, fecha en la que tienen previsto acudir, y dirigirse a los manifestantes, Chávez y Morales, además del ministro cubano de Asuntos Exteriores, Felipe Pérez Roque.

A la Cumbre de Viena está confirmada la asistencia, por el lado europeo, de prácticamente todos los jefes de Estado y Gobierno, con la excepción del holandés Jan Peter Balkenende, que enviará a su ministro de Exteriores, Bernard Bot; el sueco Goran Persson, representado por la ministra de Desarrollo Internacional, Carin Jamtin; y el italiano, Silvio Berlusconi, cuyo Gobierno está en sus últimos días y estará representado en Viena por un secretario de Estado. Sin embargo, sí está prevista la asistencia de los jefes de Gobierno de varios países que aún están a las puertas de la UE: Bulgaría, Rumanía, Croacia y Turquía.

Desde el continente americano se espera la asistencia de 20 de los 31 países de Latinoamérica y el Caribe invitados a la Cumbre. Entre los asistentes están los presidentes de Argentina, Néstor Kirchner; Brasil, Luis Ignacio 'Lula' da Silva; Bolivia, Evo Morales; Venezuela, Hugo Chávez; Chile, Michelle Bachelet; México, Vicente Fox; Nicaragua, Enrique Bolaños; Guatemala, Oscar Berger; Ecuador, Alfredo Palacios; Uruguay, Tabaré Vázquez; Perú, Alejandro Toledo y Paraguay, Nicanor Duarte.

Las ausencias serán las del cubano Fidel Castro, el colombiano Alvaro Uribe, el costarricense Abel Pacheco, el dominicano Leonel Fernández, el salvadoreño Antonio Elías Saca y el panameño Martín Torrijos. Tampoco asistirán los primeros ministros de varios países de la Comunidad del Caribe (CARICOM).

Estarán también el secretario general de la ONU, Kofi Annan, el alto representante de la UE para la Política Exterior y SEguridad Común (PESC), Javier Solana; el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; y los comisarios de Exteriores, Comercio y Ayuda Humanitaria, Benita Ferrero-Waldner, Peter Mandelson y Louis Michel, respectivamente.

También estarán el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell; el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias; la presidenta del Comité Económico y Social Europeo (CESE); el secretario general de la Comunidad Andina de Naciones, Alan Wagner; el secretario general del CARICOM, Edwin Wilberforce Carrington; el presidente del Banco Central Europeo (BEI), Philippe Maystadt y el del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, así como el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Juan Somavia, y el de la Oficina de la ONU contra las Drogas y el Crimen Organizado, Antonio María Costa.