Publicado 11/02/2021 11:50

Detienen a una líder de una facción del Partido Comunista de Nepal por "crímenes contra el Estado" durante las protestas

Protestas en Nepal por la disolución del Parlamento.
Protestas en Nepal por la disolución del Parlamento. - Dipen Shrestha/ZUMA Wire/dpa

MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

Ram Kumari Jakri, líder de una facción rival del Partido Comunista Nepalí, ha sido detenida este jueves por cometer presuntamente "crímenes contra el Estado" en el marco de las protestas que están teniendo lugar en el país contra la disolución del Parlamento y la convocatoria de nuevas elecciones.

La Policía ha informado en declaraciones al diario 'The Kathmandu Post' que Jakri ha sido trasladada a una comisaría para ser interrogada en relación con los recientes comentarios vertidos sobre la presidenta del país, Bidya Devi Bhandari, que ordenó a mediados de enero la disolución de la Cámara a petición del primer ministro, Jadga Prasad Sharma Oli.

La líder de la facción Pushpa Kamal Dahal-Madhav Kumar Nepal --nombre que hace referencia al excomandante guerrillero y el ex primer ministro comunista que se encuentra al frente de la convocatoria de las protestas-- ha sido arrestada cuando se encontraba en su vivienda en Shanjamul, Katmandú.

Según la orden de arresto, Jakri ha sido detenida por cometer "crímenes contra el Estado" en el marco del artículo 58 del Código Penal, que señala que "ninguna persona intimidará, ya sea mediante la fuerza o no (...), al presidente o al Parlamento de Nepal con la intención de prevenir o restringir al presidente o al Parlamento de Nepal de realizar cualquiera de las funciones requeridas para ser desempeñadas en conformidad con la Constitución o la ley".

Un portavoz de la División de Criminología Metropolitana de la Policía ha indicado que "se tomarán todas las medidas pertinentes para interrogarla". Los agentes insisten en que la opositora habría realizado declaraciones "contrarias a la ley".

Sin embargo, ella considera que se trata de una "restricción a su libertad de expresión" y ha lamentado que se tata de una forma de "acoso" llevada a cabo por "dictadores cuando están a punto de caer". "Usan todo tipo de trucos", ha dicho. De ser hallada culpable podría tener que cumplir una pena de hasta siete años de prisión.

Las protestas registradas durante los últimos días en el país se han topado a su vez con marchas multitudinarias en señal de apoyo al primer ministro, también en la capital del país. Se trata del último movimiento desde que la presidenta anunciara la disolución del Parlamento y convocara elecciones para el 30 de abril y el 10 de mayo.

Oli ha asegurado que el motivo de la disolución se debe al bloqueo y la imposibilidad de sacar adelante su agenda política por parte de sus propios compañeros de bloque, a quienes acusa de intentar desbancarlo. Sin embargo, sus detractores tildan de inconstitucional la disolución, que ha provocado divisiones internas en el seno del Partido Comunista.