Pide disculpas a los ecuatorianos por iniciar el plan de racionamiento de energía sin previo aviso
QUITO, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reconoció este viernes que el problema de suministro de electricidad en ese país es "grave" y no descarta que esta situación se pueda prolongar por "varios meses", por lo que será necesario continuar con el programa de racionamiento de energía.
Ante esta situación, que ha generado molestias en la población, Correa apeló a la "unidad nacional" y a la colaboración de todos los ecuatorianos para poder hacer frente a esta delicada situación, derivada de la fuerte sequía que ha reducido los niveles en el embalse de la central hidroeléctrica de Paute, responsable de suministrar energía al 35 por ciento del país.
El Gobierno de Ecuador puso en marcha esta semana un plan de racionamiento de electricidad, tanto a nivel residencial como a nivel industrial, que contempla apagones que podrían extenderse hasta siete horas diarias.
La mayor parte de los cortes de energía serán en las zonas residenciales, para dar mayor prioridad a las áreas industriales y comerciales y no afectar así al sector productivo del país. Sin embargo, algunos industriales han asegurado que han comenzado a tener pérdidas por estos apagones.
Habitantes de algunas ciudades han denunciado que el Ministerio de Electricidad comenzó a realizar los cortes de energía sin previo aviso, hecho que fue reconocido por Correa quien ha pedido disculpas a la población por la premura con la que se puso en marcha este plan de racionamiento.
"Lo que sucede es que nosotros calculábamos que el anterior lunes llovería, pero lamentablemente no llovió y disminuyó el caudal. Fue por esa razón de se decidió empezar con los racionamientos el día siguiente sin previo aviso, por eso les pedimos disculpas por esa medida", expresó en declaraciones a la prensa en la ciudad de El Coca, en la provincia de Francisco de Orellana.
Correa ha responsabilizado de esta crisis a los gobiernos anteriores que, según él, no invirtieron ni tomaron medidas para mejorar el sistema eléctrico nacional para cubrir la demanda ante una oferta que comenzó a hacerse escasa desde hace algún tiempo.
"Esperamos que la ciudadanía sepa diferenciar entre los que causan los problemas y los que estamos resolviéndolos. Ahí están las consecuencias de la prudencia de minimizar el gasto público porque 20 años no se ha invertido en electricidad", aseguró.