QUITO (Reuters/EP) - Ecuador dijo el miércoles que la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos desechó definitivamente una demanda de la petrolera Chevron, con la que buscaba que el país andino comparta responsabilidades en caso de perder un juicio ambiental que se sigue en su contra.
La demanda de Chevron había sido denegada en cortes inferiores, por lo que la petrolera la elevó a la máxima instancia de la justicia estadounidense.
Indígenas y campesinos ecuatorianos plantearon a las cortes del país andino una demanda contra Chevron, en la que se pide una indemnización de hasta 16.300 millones de dólares.
El fallo a favor de Quito fue calificado como un "triunfo" por el Procurador del Estado, Diego García, pues termina con uno de los conflictos legales que mantiene el país con la petrolera en cortes estadounidenses.
"La Corte acaba de dictar sentencia (...) El triunfo es obviamente muy favorable a lo que pretende el Ecuador", agregó García, a periodistas.
Las comunidades indígenas culpan a la petrolera estadounidense de contaminar la selva y dañar su salud al verter millones de litros de agua contaminada durante su operación de áreas petroleras, antes de que Chevron cediera sus operaciones a la estatal Petroecuador.
Para enfrentar la millonaria demanda, Chevron, que adquirió a Texaco en el 2001, pidió la corresponsabilidad del país andino a través de algunas litigios internacionales, argumentando que
Petroecuador tenía una vinculación contractual con sus operaciones.
"Si hubieran obtenido una sentencia favorable, podían seguir adelante con su pretensión de que Ecuador sea corresponsable de los daños ambientales que son materia de una discusión privada", explicó el procurador, que actúa como abogado de la nación.
García aclaró que la Corte Suprema de Justicia dispuso que su sentencia sea la "última palabra".
Ecuador todavía tiene pendiente en cortes de Estados Unidos una alegación de Chevron que argumenta una violación de un acuerdo suscrito con Ecuador, al permitir la continuación del juicio ambiental por parte de los indígenas ecuatorianos.
(Por Alexandra Valencia. Editado por Mario Naranjo)