Actualizado 23/03/2006 22:39

Ecuador.- Palacio niega la posibilidad de una consulta popular sobre el TLC y rechaza la mediación de la Iglesia

La Iglesia se niega a mediar y el presidente del Congreso acusa a los indígenas de "destruir el país"


QUITO, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Ecuador, Alfredo Palacio, negó hoy la petición de los indígenas de realizar consulta popular respecto al Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, uno de los requisitos que los manifestantes exigen para dar por finalizados los paros que afectan al país desde hace dos semanas.

Así mismo, Palacio rechazó la mediación de la Iglesia en el conflicto entre indígenas y Gobierno, aseguró que existen varias fuerzas que buscan desestabilizar a las instituciones democráticas

El mandatario manifestó que no necesitan mediadores, ya que pueden hablar directamente con los indígenas, y aseveró que la única mediación que necesitan es que se deponga las medidas de hecho que mantienen a las provincias centrales del país desabastecidas y están causando enormes pérdidas económicas.

Según el presidente, no se puede realizar una consulta de un acuerdo que no está firmado, por lo que primero "deben finalizar las negociaciones", que se retomaron hoy en Washington, recoge el diario local 'Ecuador Inmediato'.

LA NEGATIVA DE LA IGLESIA

Por otra parte, la Conferencia Episcopal Ecuatoriana se negó hoy a mediar entre los representantes del movimiento indígena y el Gobierno de Alfredo Palacio respecto a la consulta popular sobre el Tratado de Libre Comercio (TLC) que los indígenas exigen al Gobierno y Palacio se niega a realizar.

Hoy representantes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) llegaron hasta la sede de la Conferencia Episcopal, donde recibieron la noticia de que el Gobierno no emprenderá ningún diálogo respecto al TLC mientras los manifestantes no cesen los bloqueos de carreteras.

El presidente de la CONAIE, Luis Macas, señaló que ahora verán que es lo que pasa con la ciudadanía y aseveró que continuarán con las medidas de presión al Gobierno.

DESTRUCCIÓN DEL PAÍS

Por su parte, el presidente del Congreso, Wilfrido Lucero, arremetió los movimientos indígenas, principalmente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), acusándoles de estar "destruyendo al país" con las protestas que están llevando a cabo.

"Esto tiene que terminarse porque afecta a todos los ecuatorianos" pidió el presidente del Congreso, quien valoró que ya no se trata de una protesta contra el Gobierno y que se ha convertido en "una agresión a los ecuatorianos que no tenemos por qué ser víctimas de unas medidas tienen sentido ni proporción", zanjó.

Lucero aventuró que las reclamaciones de los indígenas no serán escuchadas "rompiendo carreteras, agrediendo domicilios y edificios, y, menos aún paralizando el transporte, impidiendo el turismo, desabastecimiento a los mercados, permitiendo que los productos de primera necesidad suban cinco o seis veces". Igualmente agregó que en las medidas de protesta no están contribuyendo a "construir un país, sino a destruir el país", puntualizó.