Susan Lee trasladará a Exteriores su preocupación por la venta de armas a Colombia y el apoyo de Zapatero a la Ley de Justicia y Paz
MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
La organización humanitaria Amnistía Internacional pedirá hoy al Gobierno español que exija al Gobierno de Estados Unidos el cierre inmediato de la prisión militar que tiene en la Bahía de Guantánamo (Cuba), tal como hizo el pasado fin de semana la canciller alemana, Angel Merkel, según informó la directora del Programa Regional para América de AI, Susan Lee.
Lee, que se encuentra de visita en Madrid y mantuvo esta mañana un desayuno de trabajo con varios medios de comunicación, tiene previsto reunirse esta tarde con el secretario de Estado de Asuntos Exteriores e Iberoamérica, Bernardino León, a quien trasladará la petición de la organización para que Madrid se sume a la postura adoptada por Berlín y haga un llamamiento a Washington exigiendo el cierre de Guantánamo.
Este martes, la Oficina Europea de Amnistía Internacional ya propuso a la Unión Europea que siga los pasos de Merkel e impulse el cierre de la prisión de Guantánamo en una carta abierta en la que también criticó la "pasividad" de la institución respecto al "vergonzoso agujero negro legal" que suponen las actividades que Washington lleva a cabo desde hace cuatro años en la base naval.
Para la directora del Programa Regional para América de Amnistía Internacional, Guantánamo es sólo "la punta del iceberg" de toda una red de cárceles clandestinas y de centros de torturas secretos que Estados Unidos tiene extendida por todo el mundo, en Afganistán y en Irak, pero también en un número no determinado de otros países. "Y quizá los hubo o los sigue habiendo en Europa", añadió.
Asimismo, insistió en que la situación en Guantánamo es el punto "más emblemático y más visible" de toda una política de detenciones arbitrarias, traslados ilegales de presos, torturas y maltratos que suponen "serias y sistemáticas" violaciones a los Derechos Humanos cometidas por el Gobierno de George W. Bush "en nombre de su política de seguridad para la lucha contra el terror".
MURO DE EEUU
En este punto, se refirió a la polémica decisión de Estados Unidos de construir un muro en la frontera con México con la intención, según Washington, de intentar frenar la inmigración. Lee muestra su "preocupación" pero de momento no quiere ser más contundente. "Amnistía no condena un muro sino lo que pueda suceder en torno a él y su impacto en los derechos de las personas", subrayó.
Por otro lado, volvió a expresar la preocupación de AI por la pena de muerte en Estados Unidos, al recordar que en diciembre pasado se alcanzó la cifra de 1.000 ejecutados. Así, aunque reconoció que se han logrado "algunos avances" -como la prohibición de aplicar la pena capital a los menores de edad y a discapacitados mentales- insistió en que debe abolirse para cualquier caso.
La representante de AI también denunció las contrataciones de mercenarios latinoamericanos por parte de supuestas empresas de seguridad norteamericanas para enviar a lugares de conflicto como Irak o Afganistán. Lee explicó que no se trata de una práctica nueva la contratación de civiles para llevar acabo labores militares, al recordar casos como el colombiano.
"Es una extensión de una práctica ya existente puesta en marcha por Estados Unidos para evitar el riesgo de exponer a su personal a que tengan que responder por las eventuales acciones delictivas que cometan", denunció Lee, quien afirmó que en estos momentos se están preparando demandas civiles contra esas empresas e incluso contra la Administración Bush.
VENTA DE ARMAS
Durante su encuentro de esta tarde con León, la representante de Amnistía también quiere trasladar al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero su "gran preocupación" por otros aspectos relacionados con el papel que está jugando España en la región, las consecuencias de la venta de armas a países como Colombia o el apoyo que dio Zapatero a polémicas leyes como 'Justicia y Paz' del presidente Uribe.
De hecho, Lee volverá a recordar a León la posición de AI al respecto, e insistirá en exigir a las autoridades españolas que establezcan controles rigurosos para que ese armamento no sea utilizado para arremeter contra civiles ni para cometer violaciones de Derechos Humanos, tal como ya se ha documentado en ocasiones anteriores.
En este sentido, recordó que la crisis humanitaria que se vive en Colombia desde hace cuatro décadas "es de las más persistentes, menos comprendida y más olvidada" por la comunidad internacional. Además, consideró que la política aplicada por el Gobierno de Alvaro Uribe ha sido un "absoluto fracaso" y la situación sigue siendo igual de preocupante en el país.
Sin embargo, para Lee sí hay una posible solución al conflicto colombiano, y asegura que necesariamente pasa por aplicar el plan de acción propuesto por Naciones Unidas (ONU), a través de una serie de recomendaciones que el Gobierno de Uribe "dice que cumplirá pero que en la práctica no lo hace".
Por último, expresó sus dudas sobre el plan de desmovilización de los grupos paramilitares, enmarcado en la polémica Ley de Justicia y Paz, y criticó el respaldo político que dio el Gobierno de Zapatero a Bogotá y las ayudas económicas ofrecidas por la Unión Europea para su puesta en marcha. ¿Qué controles pondrá Bruselas para que esas ayudas no terminen fortaleciendo a los paramilitares?, se preguntó.