Publicado 30/09/2020 17:03

EEUU anuncia sanciones contra el jefe de los servicios de Inteligencia y el gobernador del Banco Central de Siria

Siria.- EEUU anuncia sanciones contra el jefe de los servicios de Inteligencia y
Siria.- EEUU anuncia sanciones contra el jefe de los servicios de Inteligencia y - --/SANA/DPA / -- - Archivo

MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado este miércoles sanciones contra trece entidades y seis personas de Siria, incluidos el jefe de los servicios de Inteligencia y el gobernador del Banco Central, por sus lazos con el presidente del país, Bashar al Assad.

El Departamento del Tesoro estadounidense ha indicado en un comunicado que las sanciones "son parte de los continuados esfuerzos del Gobierno estadounidense para lograr una resolución pacífica y política al conflicto sirio", antes de agregar que los afectados son "facilitadores clave del régimen de Al Assad".

Así, ha detallado que los sancionados "están asociados con la Cuarta División del Ejército sirio, la Dirección General de Inteligencia y el Banco Central de Siria". Entre los afectados figura un "importante empresario" que ejerce de "intermediario" entre la Cuarta División y "su red de negocios, que generan ingresos para el régimen".

"Los que continúen del lado del brutal régimen de Al Assad siguen permitiendo su corrupción y abusos de los Derechos Humanos", ha denunciado el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en un comunicado.

"En un momento en el que se cumplen tres años de la matanza de civiles a manos del régimen en Armanaz, Estados Unidos seguirá usando todas sus herramientas y autoridad para actuar contra las finanzas de cualquier que se beneficie o facilite los abusos del régimen de Al Assad contra el pueblo sirio", ha remachado.

Mnuchin ha hecho así referencia a la muerte de cerca de 30 civiles, incluidos cuatro niños, en una serie de bombardeos ejecutados en la noche del 29 de septiembre de 2017 contra la localidad de Armanaz, situada en la provincia de Idlib (noroeste).

Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, ha señalado que las sanciones "son parte de la campaña continuada de la Administración para lograr los objetivos de la 'Ley César' y hacer que Al Assad y sus facilitadores rindan cuentas por sus crímenes, incluidos los asesinatos en Armanaz y en incontables comunidades sirias".

En esta línea, ha adelantado que la aplicación de sanciones contra "altos cargos del Gobierno, comandantes militares y destacados empresarios corruptos no terminará hasta que el régimen de Al Assad y sus facilitadores den pasos irreversibles para poner fin a su campaña de violencia contra el pueblo sirio y apliquen la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas".

"Hasta la fecha, los facilitadores extranjeros de Al Assad sólo han fortalecido a los compinches del régimen y han profundizado su implicación en un aparato financiero y militar explotador que mantiene la supervivencia del régimen", ha argüido Pompeo.

Por último, ha manifestado que "hay un claro camino hacia adelante" y que "el pueblo sirio ha sufrido suficiente". "Es momento de una resolución política y pacífica del conflicto sirio, tal y como reclama la resolución 2254", ha zanjado.

La 'Ley César', que obtuvo en diciembre de 2019 apoyo de los dos partidos estadounidenses en el Congreso, contempla sanciones para militares y otros responsables de atrocidades durante la guerra y a los que hayan prestado apoyo "a los esfuerzos militares del régimen de Al Assad", además de apoyar a aquellos organismos que recaben pruebas sobre crímenes de guerra.

Asimismo, expande el anterior régimen de sanciones, al contener una cláusula contra instituciones gubernamentales e individuos que hagan negocios con Damasco, lo que podría afectar a los esfuerzos de reconstrucción que intenta llevar a cabo el Gobierno sirio.

La ley recibió el nombre por un desertor del Ejército sirio conocido por el alias de 'César', que tomó más de 55.000 imágenes tanto en la prisión como en los hospitales militares y que muestran unos 11.000 cuerpos desnutridos con signos de violencia, como golpes o estrangulación y otras formas de torturas.