Actualizado 19/10/2010 10:23

EEUU y Cuba mantuvieron un contacto diplomático en septiembre


WASHINGTON, 19 Oct. (Reuters/EP) -

El máximo representante diplomático de Estados Unidos para América Latina, Arturo Valenzuela, se reunió el pasado mes de septiembre con el ministro de Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, para buscar la liberación de Alan Gross, un contratista estadounidense acusado de espionaje en la isla, en lo que supone el mayor contacto diplomático entre ambos países desde la llegada de Barack Obama a la presidencia de Estados Unidos.

Valenzuela, subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, mantuvo un breve encuentro con Rodríguez en los márgenes de la Asamblea General de Naciones Unidas, celebrada en Nueva York, informó este lunes un portavoz del Departamento de Estado sin precisar la fecha exacta de la reunión.

"El objetivo de la reunión era transmitir al Gobierno cubano que Estados Unidos busca la liberación de Alan Gross, un trabajador dedicado al desarrollo, quien ha estado detenido sin cargos en Cuba desde diciembre de 2009", indicó la misma fuente.

"No hubo grandes progresos ni otras conversaciones reseñables", añadió. "La reunión fue cordial, con Valenzuela haciendo énfasis repetidamente en la importancia de la liberación de Alan Gross".

El pasado 14 de septiembre, Valenzuela dijo que la detención de Gross impedía "avanzar en cierta clase de medidas que nos gustaría adoptar respecto a Cuba". "Es un obstáculo para intentar avanzar en lo que podría ser más que un diálogo entre los dos países", señaló entonces.

Fuentes del Congreso de Estados Unidos afirmaron en agosto que la Administración Obama estaba preparando una serie de medidas para reducir las restricciones en los viajes a Cuba para aquellos ciudadanos estadounidenses que quisieran viajar a la isla como parte de intercambios académicos, culturales o religiosos.

Gross trabajaba para una compañía de Washington que había sido contratada por un programa de desarrollo financiado por Estados Unidos para promover la democracia en Cuba, según la versión estadounidense. A principios de diciembre fue arrestado en el aeropuerto de La Habana por presunto espionaje y subversión.

El Gobierno cubano asegura que Gross cometió "serios delitos" para desestabilizar Cuba al dar equipos de telecomunicaciones a miembros de la disidencia cubana. Según las autoridades estadounidenses, el contratista proporcionaba acceso a Internet a grupos judíos antes de entrar en la isla con un visado de turista. Su detención interrumpió los esfuerzos de Obama para mejorar las relaciones con La Habana.