MOSCÚ, 2 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno kazajo ha dejado claro que condena "cualquier forma de terrorismo", al tiempo que se ha comprometido a seguir cooperando con las autoridades estadounidenses tras la detención el miércoles de dos estudiantes kazajos por destruir pruebas relacionadas con Dzhokhar Tsarnaev, uno de los dos sospechosos del atentado que el pasado 15 de abril acabó con la vida de tres personas en el maratón de Boston y dejó más de 200 heridos.
"Como hemos subrayado repetidamente, Kazajistán condena enérgicamente cualquier forma de terrorismo. Kazajistán está cooperando con los cuerpos de seguridad estadounidenses en su investigación", ha afirmado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado publicado en su página web oficial.
Los estudiantes kazajos detenidos, Dias Kadyrbayev y Azamat Tazhayakov, que están acusados de violar la legislación de inmigración estadounidense y de haber destruido pruebas para ayudar a Dzhokhar Tsarnaev, deberían haber comparecido el miércoles ante un tribunal pero sus comparecencias han sido aplazadas, por lo que permanecen ingresados en una prisión federal. Su vista está prevista para el próximo 14 de mayo.
El Ministerio de Asuntos Exteriores kazajo ha hecho especial hincapié en que los dos estudiantes no han sido acusados de estar involucrados en el atentado del maratón. "Nos gustaría enfatizar que nuestros ciudadanos no tienen cargos por estar involucrados en la organización de los atentados con bomba del maratón de Boston. Están procesados por destruir pruebas", ha afirmado el departamento.
El Ministerio kazajo ha dicho que los dos jóvenes están recibiendo la "necesaria asistencia consular" y ha remarcado que su culpabilidad "no ha sido demostrada". "La investigación está en curso", ha afirmado, para después asegurar que "tanto Kadyrbayev como Tazhayakov están cooperando" con los investigadores.
Según Reuters, en caso de ser condenados, los dos kazajos podrían ser sentenciados a cinco años de prisión. Junto a esos dos estudiantes el miércoles fue detenido otro joven de 19 años, de nacionalidad estadounidense, acusado de dar falso testimonio para ayudar al hermano pequeño de los Tsarnaev.