Actualizado 17/12/2013 22:04

Obispos de EEUU piden que la reforma migratoria se apruebe en 2013

El cardenal Dolan, de EEUU
Foto: REUTERS

WASHINGTON, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, el cardenal Timothy Dolan, ha escrito una carta al presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, en la que afirma que la reforma migratoria es "una cuestión de gran urgencia moral" y pide que se apruebe este año.

   Según informa el diario estadounidense 'Newsmax', el arzobispo de Nueva York ha advertido de que la inmigración es "un reto importante" y añade que "no se puede esperar más tiempo" para impulsar esta legislación. "Mantener a los trabajadores indocumentados como una subclase permanente es una mancha en el alma de nuestra nación", añade.

   En este sentido, ha denunciado la "poca acción" de los funcionarios federales y señala que la Cámara "tiene la responsabilidad de debatir y tratar de resolver cuestiones de política pública que desafían a la nación". Por ello, insiste en la importancia de que estos problemas se solucionen en 2013.

   En septiembre, Dolan ya escribió un artículo de opinión para el 'New York Daily News' en el que indicaba que el Congreso tenía "una oportunidad única" para aprobar una reforma migratoria y mejorar un sistema que no funciona correctamente. Además, afirmó que los inmigrantes "demostrarían su compromiso con Estados Unidos si se les ofrece una manera de convertirse en ciudadanos".

COINCIDE CON LA PETICIÓN DE OBAMA

   El pasado 24 de octubre, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hacía hincapié en la necesidad de que el Congreso saque adelante este año una ley para arreglar el "quebrado sistema migratorio" norteamericano, en aras no sólo de mejorar la situación de miles de personas sino también de avanzar en términos de seguridad y economía.

   "Hemos estado postergándolo durante demasiado tiempo", advirtió Obama, en un discurso en el que no dio ningún argumento nuevo pero con el que, según la CNN, el presidente aspiraba a poner de nuevo en primer plano una de las reformas que prometió llevar a cabo cuando llegó a la Casa Blanca.

   Para sacar adelante la reforma migratoria, Obama necesita del consenso entre demócratas y republicanos, ya que los dos partidos se reparten el control de las dos cámaras del Congreso. En junio, los demócratas sacaron adelante un texto en el Senado que cayó en saco roto en la Cámara de Representantes.

   Para Obama, "no tiene sentido" que "once millones de personas" que viven de forma irregular en Estados Unidos no puedan "salir de las sombras" y "cumplir la ley". Una reforma migratoria les permitiría "cumplir con sus responsabilidades" y ayudaría a que sus familias "avanzasen", según concluyó el presidente.