MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El banco estadounidense Wells Fargo contabilizó un beneficio neto atribuido de 17.938 millones de dólares (16.129 millones de euros) en el conjunto de 2019, lo que supone una caída del 13% en comparación con respecto al año anterior, según los resultados publicados este martes por la entidad.
El presidente y consejero delegado de la firma, Charles Scharf, que lleva apenas tres meses en el cargo, ha adelantado que la empresa llevará a cabo un programa de recorte de gastos para mejorar la rentabilidad.
"A pesar de mi corto periodo de tiempo en la compañía, está claro que hay oportunidades para mejorar nuestro rendimiento", ha explicado el primer ejecutivo de Wells Fargo.
"Nuestra estructura de costes es muy elevada, y creo que hay muchas áreas que serán capaces de incrementar nuestra ratio de crecimiento", ha agregado.
Los ingresos del banco en los doce meses se contrajeron un 2%, hasta 85.063 millones de dólares (76.579,1 millones de euros). En concreto, los ingresos netos por intereses descendieron un 6%, hasta 47.231 millones de dólares (42.520,3 millones de euros). Esa caída no pudo ser compensada por la facturación procedente de las comisiones y la intermediación, que avanzaron un 4%, hasta 37.832 millones de dólares (34.058,8 millones de euros).
Por segmentos de negocio, la división de banca minorista contabilizó una cifra de negocio de 45.316 millones de dólares (40.796,3 millones de euros), un 3,4% menos, al tiempo que el segmento de banca corporativa y de inversión generó de 27.677 millones de dólares (24.916,9 millones de euros), un 3,6% menos. El área de gestión de patrimonio registró un crecimiento del 5,9%, hasta 17.341 millones de dólares (15.611,6 millones de euros).
Frente a la caída de la facturación de la entidad, los gastos crecieron un 4%, hasta 58.178 millones de dólares (52.376,1 millones de euros). La masa salarial de Wells Fargo se situó en 18.382 millones de dólares (16.548,8 millones de euros), un 3% más, mientras que las retribuciones por comisiones e incentivos registraron un alza del 5%, hasta 10.828 millones de dólares (9.748,2 millones de euros).
El resto de beneficios para empleados repuntó un 19%, hasta 5.874 millones de dólares (5.288,2 millones de euros), al tiempo que los costes no desglosados crecieron hasta 16.752 millones de dólares (15.081,4 millones de euros), un 7% más.
"Aunque estamos gastando lo que es necesario para mejorar nuestra gestión de riesgos, los demás gastos fueron muy elevados y volvernos más eficientes sigue siendo una prioridad", ha apostillado el director financiero de la compañía, John Shrewsberry.
En el cuarto trimestre del año pasado, el beneficio neto atribuido del banco se desplomó un 55%, hasta 2.546 millones de dólares (2.292,1 millones de euros), como consecuencia de una caída del 5% de los ingresos, hasta 19.860 millones de dólares (17.879,4 millones de euros), y un aumento de los costes del 17%, hasta 15.614 millones de dólares (14.056,9 millones de euros).